Foto: MARTA FERNÁNDEZ/EPVALÈNCIA (EP). El 69,3% de la ciudadanía apoyaría una intervención pública para controlar el precio de la luz, cuyas sucesivas subidas figuran ya como el noveno problema nacional en el barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) - correspondiente al mes de noviembre.
Según este estudio, hecho público este miércoles, cerca de la mitad de las personas entrevistadas (48,2%) admite que en los últimos meses su recibo de la luz ha subido "mucho o bastante", un asunto que preocupa al 92,2% del total.
En el otro extremo figura un 31,9% que sostiene que su factura se ha incrementado "poco" o nada", y también hay 18,6% que confiesa que no lo tiene claro. El porcentaje al que esta situación apenas le inquieta es del 7,1.
El CIS que dirige el sociólogo socialista Jose Félix Tezanos no busca culpables de los máximos de la luz ni pregunta expresamente por los motivos de la subida, pero sí sobre el sistema que se usa para fijar el precio de la electricidad que, para el 83,2% es "bastante" o "totalmente incorrecto", frente al 3,4% que no pone pegas.
En este contexto, la inmensa mayoría (97,5%) sostiene que la luz debería ser considerada como un bien de consumo básico, igual que el agua, y el 69,3% defiende que sería conveniente una intervención pública para controlar su precio. Sólo un 14,1% considera que una intervención sobre las tarifas "tendría efectos negativos sobre el sector eléctrico".
Además de las preguntas concretas sobre este particular que el CIS ha incluido en su barómetro de noviembre, la subida de las tarifas energéticas también aparece citada de forma espontánea por los entrevistados cuando se les interroga sobre los principales problemas de España.
En concreto, figura en el noveno puesto de esa lista, al ser mencionada en el 7,2% de los cuestionarios, frente al 3,4% de octubre y el 3,8% de septiembre. También aparece en la relación problemas que afectan más personalmente a los españoles, en este caso en la sexta posición, con un 8,9%.
Aunque su porcentaje de menciones cae cuatro puntos respecto al barómetro anterior, el paro sigue encabezando la lista de inquietudes nacionales con un 41,3%, seguido de la crisis económica, que sube un punto y llega al 35,4%.
Por segundo mes consecutivo, vuelven a aumentar las menciones a la sanidad, que marca nuevo récord del año y repite en la tercera plaza, esta vez con un 21,1%. La inquietud por el coronavirus, que había caído casi 10 puntos en octubre, sube ahora ligeramente hasta el 15,5% (en la quinta posición), pero muy lejos del 51,4% con el que arrancó 2021.
Entre la sanidad y el Covid, como cuarta preocupación, se sitúan los problemas políticos (16,5%), mientras que el mal comportamiento de los políticos recibe menciones en el 14,5% de las encuestas.
Los problemas relacionados con la calidad el empleo escalan tres puestos en noviembre y se colocan en la séptima posición con un 9,1%, seguidos de la educación (8,7%) y la subida de las tarifas energéticas (7,2%).
La crisis económica es la primera inquietud personal (34,1%), la sanidad figura en el segundo puesto (24,3%), seguida muy de cerca por el paro (24%) y, con menor porcentaje, aparecen también la calidad el empleo y el Covid (ambos con un 10,9%) y la subida de las tarifas energéticas (8,9%).
El porcentaje de personas que consideran "mala" o "muy mala" la coyuntura económica se sitúa en el 67%, frente a un 20,9% que cree que es "buena" o "muy buena". Un 24,4% confiesa que su situación personal en este terreno es "mala" o "muy mala" mientras que el 61,6% dice no tener problemas de dinero.
La previsión sobre el euríbor para 2024 sitúa el indicador a final del próximo año en una horquilla que va del 3% al 4,2%
