La dirección de las políticas monetarias está clara, pero la velocidad a la que se moverán los diferentes bancos centrales mundiales sufrirá cambios. La semana pasada, el Banco Central Europeo (BCE) redujo los tipos en 25 puntos básicos, lo que supone su tercera bajada de tipos este año.
Esta semana se conocerá la decisión del Banco de Canadá sobre los tipos de interés en octubre. Canadá ocupa el primer puesto entre los principales bancos centrales del mundo en conseguir mantener la inflación dentro de su objetivo. Según los datos de septiembre, el índice de precios al consumo (IPC) medio recortado, medido por el Banco de Canadá, se situó dentro de su objetivo por octavo mes consecutivo este año (en abril se disparó por encima del objetivo antes de volver a bajar). El IPC general también se situó por debajo del 2% en septiembre.
Por otra parte, el componente más sensible de la inflación canadiense, la vivienda, se ha moderado sustancialmente desde junio. Con la inflación a punto de alcanzar el objetivo y una demanda interna mucho más débil, hay más razones para que el BoC vaya más rápido que la Fed y el BCE. Con este telón de fondo, el BoC podría bajar su tipo de interés oficial 50 puntos básicos en lugar de 25 puntos básicos esta semana.