José Antonio Rovira recibe la cartera de Cultura de manos de Vicente Barrera. Foto: KIKE TABERNERVALÈNCIA. Fue un espejismo. La decisión de Vox de abandonar el gobierno valenciano de coalición con el PP, el pasado jueves, llevó a Carlos Mazón a reconfigurar rápidamente el Consell. El mismo jueves por la noche se publicó en el Diari Oficial de la Generalitat (DOGV) el cese de los tres consellers de Vox y al día siguiente el DOGV publicaba un decreto del president que determinaba el nuevo número y denominación de las consellerias. En virtud de ese decreto, desaparecía la Vicepresidencia Primera y Conselleria de Cultura y Deporte, que ostentaba Vicente Barrera, y sus competencias se repartían entre Educación, que asumía Cultura, y Presidencia, de la que dependerá Deportes.
En la nomenclatura llamó la atención que el departamento que dirige José Antonio Rovira pasara a llamarse "Conselleria de Cultura, Educación, Universidades y Empleo". ¿Tal vez una compensación al mundo cultural que, una vez más, se veía relegado en el plano institucional a un papel subalterno dentro de una conselleria con demasiado trabajo en su principal área desde el punto de vista presupuestario, que es Educación?
Nada de eso. Fue un simple error que el conseller ya corrigió in voce el martes cuando juró el cargo como "conseller de Educación, Cultura, Universidades y Empleo". Este miércoles, el DOGV deshacía definitivamente el equívoco al publicar una fe de errores con esta y otras correcciones a los presurosos decretos del pasado viernes. Primero Educación y luego Cultura.
