MADRID (EFE). El Gobierno prorrogará las medidas para paliar el alza de los precios de la energía que estén funcionando y que crea más convenientes, y "modulará" o hará "desaparecer" aquellas que "no son particularmente acertadas".
Así lo ha defendido la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, en una entrevista con EFE al ser preguntada por si se prorrogarán medidas como el descuento de 20 céntimos por litro de carburante, vigentes hasta fin de año.
Por el contrario, ha dicho que "se modularán o desaparecerán" aquellas medidas que "por las razones que sean, no son particularmente acertadas".
En cualquier caso, seguirá siendo necesario "combinar medidas de amplio espectro, con las que todo el mundo ve aliviada su factura, como la reducción de la carga fiscal del gas o la electricidad", con otras dirigidas a los grupos de población específicos, como se ha hecho con el bono social.
En este sentido, y respecto a las medidas anunciadas por Alemania, que limitará a 12 céntimos de euros por kilowatio/hora el precio del gas y a 40 céntimos el de la electricidad, Ribera ve "comprensible" una "cierta indulgencia" para gestionar su difícil situación, pero hubiera sido mejor "adoptar medidas para el conjunto de la UE que no dejarlo en manos de la capacidad de cada uno".
Ribera ve comprensibles esas medidas de protección a las familias, pero defiende que "es una medida generalizada, sin discriminacion de ningún tipo", que se puede permitir Alemania, al contar "con una capacidad de gasto que no tenemos ningún otro país de la Unión Europea".
Respecto a la reforma de la tarifa regulada eléctrica o Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVPC), que es la que tienen que tener los beneficiarios del bono social, la ministra mantiene su objetivo de que esté lista para el 1 de enero.
El plazo de alegaciones está abierto hasta el 7 de noviembre y el Gobierno quiere que esté aprobada antes de fin de año.
El objetivo es reformarla para que no esté tan expuesta a lo vaivenes del precio mayorista de la luz y Ribera ha asegurado que se podrán mantener en esa tarifa todas las personas que la tienen.
En su opinión, la tarifa PVPC, creada por el Ejecutivo de Mariano Rajoy, ha sido la más beneficiosa para los consumidores desde su creación y por eso, cuando el actual Gobierno tomó las riendas, no se cambió.
Sin embargo -ha explicado-, la volatilidad y el alza de precios, que sobrevino en la segunda mitad de 2021 y que se fue agudizando con la guerra de Ucrania, ha generado "tensiones difíciles de gestionar por parte de las familias".
Ribera ha indicado que el alto porcentaje de consumidores domésticos con esta tarifa fue uno de los argumentos que utilizó España para lograr que Bruselas admitiera el "mecanismo ibérico" para frenar el impacto del alza de los precios del gas en el mercado eléctrico mayorista.
Ha señalado que si no se lograba cambiar las señales de precio en el mercado, el Gobierno no podía cambiar la regulación de la tarifa habiendo unos precios de futuros "disparatados", como los que tenía España y siguen teniendo Francia y Alemania.
"La Comisión Europea lo entendió perfectamente y le pareció que era un argumento adicional para poder dar salida a todas las familias que habían quedado atrapadas en la estructura tarifaria que teníamos", ha dicho Ribera.