La pasada semana, las acciones de Dell y HP cayeron significativamente tras presentar previsiones poco optimistas para los próximos trimestres, un giro sorprendente tras el buen desempeño de sus cotizaciones durante el año.
Aunque Dell reportó un aumento interanual del 10% en sus ventas trimestrales, el descenso del 1% en la facturación de su negocio de PC decepcionó al mercado. HP, por su parte, mostró un ligero crecimiento en ventas, pero su beneficio cayó un 7%, acompañado de previsiones más bajas para el año fiscal 2025.
Estos resultados reflejan los desafíos de un mercado de ordenadores personales cuya recuperación es más lenta de lo esperado. Sin embargo, este panorama debe analizarse en el contexto de las transformaciones impulsadas por la inteligencia artificial (IA), que están reconfigurando tanto la demanda como las estrategias de los fabricantes. ¿Cómo está afectando la IA a PC y móviles? Y, más importante, ¿cómo deberían adaptarse empresas como Dell y HP?
La IA está reformulando las expectativas de usuarios y empresas, introduciendo cambios profundos en el mercado. Aunque Dell y HP son protagonistas recientes de este debate, otras marcas como Lenovo, Apple, Acer, Asus, Microsoft, Samsung y Huawei también enfrentan retos similares. La clave está en cómo cada fabricante se adapta a la demanda de hardware más avanzado y la integración de tecnologías disruptivas.
En el caso de los PC, la IA está transformando la productividad al optimizar recursos y personalizar experiencias. Funciones integradas en sistemas operativos como Windows 11 permiten desde la gestión automatizada de tareas hasta una seguridad más robusta, adaptándose a un entorno cada vez más exigente. Aun así, el ciclo de renovación de PC se ha prolongado, como señaló la directora financiera de Dell. Los consumidores esperan dispositivos más avanzados y duraderos, lo que genera una pausa en la actualización de equipos tradicionales.
Por otro lado, HP enfrenta desafíos similares. Aunque sigue siendo un actor relevante, la presión por innovar en hardware preparado para soportar aplicaciones de IA afecta sus márgenes de beneficio y las expectativas de crecimiento.
La integración de la IA en PC no solo implica avances tecnológicos, sino también económicos. La incorporación de hardware especializado, como unidades de procesamiento neuronal (NPUs) o GPUs avanzadas, eleva los costos de producción, lo que se traduce en precios más altos para los consumidores. Sin embargo, las economías de escala prometen reducir estos costos a largo plazo, democratizando tecnologías avanzadas.
Además, los PC con capacidades de IA aportan un valor añadido significativo: asistentes virtuales más funcionales, análisis de datos en tiempo real y experiencias de usuario optimizadas. Estas características, aunque inicialmente costosas, son atractivas para consumidores que buscan herramientas potentes y versátiles, especialmente en sectores como el diseño gráfico, la edición de video o la programación.
Mientras los PC rediseñan su papel en el ecosistema tecnológico, los móviles han integrado la IA de formas más visibles y cotidianas. Desde asistentes virtuales como Siri o Google Assistant hasta mejoras en la fotografía con reconocimiento de escenas y optimización de imagen, la IA en móviles está enfocada en la interacción directa con el usuario.
Los móviles también lideran en aplicaciones de salud y bienestar basadas en IA, como el monitoreo del sueño o el seguimiento de actividad física, consolidándose como herramientas esenciales en la vida diaria. Sin embargo, enfrentan limitaciones de hardware que dificultan su uso en tareas intensivas, dejando ese espacio a los PC.
La IA presenta un panorama dual para los fabricantes: mientras abre oportunidades en áreas de alto valor, también intensifica la competencia. Dell, HP y otros actores tradicionales ahora compiten no solo entre ellos, sino con empresas como Nvidia, Qualcomm y Apple, que lideran en diseño de hardware especializado para IA. Esta rivalidad añade presión para equilibrar la innovación con la rentabilidad, un desafío reflejado en las cautelosas previsiones financieras de estas compañías.
La IA está transformando los PC y móviles, redefiniendo tanto productos como mercados. Para los fabricantes, el reto será ofrecer dispositivos que combinen rendimiento, durabilidad y funcionalidad avanzada, equilibrando precios competitivos con los costos de innovación. Para los consumidores, esto podría significar acceso a tecnologías más potentes, aunque con precios iniciales más altos.
El reciente desplome de las acciones de Dell y HP no tiene por qué acrecentarse en las próximas fechas, ni por qué repetirse para otros players del sector. Pero los inversores tienen que tener en cuenta que esos bruscos movimientos de las cotizaciones no es solo un reflejo de sus previsiones económicas, sino también una señal de los profundos cambios que están redefiniendo el mercado tecnológico.
Los fabricantes que logren adaptarse a esta nueva realidad, invirtiendo en IA y respondiendo a las demandas cambiantes de los usuarios, tendrán la oportunidad de liderar en una era donde la tecnología y la inteligencia convergen.
iBroker ha establecido medidas para identificar y gestionar los posibles conflictos de interés que puedan surgir en relación con la emisión de recomendaciones. Estas medidas se encuentran detallada en la Política de Gestión de Conflictos de Interés publicada en la web www.ibroker.es
Las fuentes de información utilizadas para emitir esta recomendación fueron la plataforma gráfica www.ibroker.es y la web de la empresa
Para más información puede dirigirse a iBroker Global Markets SV SA.