VALÈNCIA. El titular del juzgado de Instrucción número 15 de Valencia ha ordenado intervenir los correos de Mónica Oltra y de 13 cargos de la Conselleria de Igualdad en un periodo concreto de tiempo relacionado con las indagaciones. El procedimiento se centra en la posible obstaculización de la investigación judicial por parte del departamento de los abusos sexuales del exmarido de la que fuera vicepresidenta de la Generalitat a una menor tutelada, con sospechas de ocultación y encubrimiento de lo ocurrido.
El magistrado respalda de esta manera lo solicitado por la Fiscalía, que consideró oportuno incorporar a la causa las comunicaciones. Todo partió de la acusación que ejerce la asociación Gobiérna-te, presidida por la exdirigente de Vox Cristina Seguí. Ésta había pedido recabar los correos entre los investigados durante el tiempo en el que se desarrollaron los hechos. Inicialmente, el Ministerio Público lo rechazó, pero el abogado de la asociación presentó un recurso en el que la modificaba y se ceñía a un intervalo más acotado.
La Fiscalía se mostró favorable a admitir parcialmente ese recurso y no se opuso a lo solicitado, aunque lo reformuló estableciendo un criterio temporal. El juez también lo acota ahora: desde el 20 de febrero hasta el 23 de marzo de 2017 y desde el 5 de julio al 1 de diciembre de 2017.
También fija un criterio material: los correos habrían de ser única y exclusivamente aquellos que hagan explícita referencia a los hechos denunciados por la víctima de los abusos y relatados en la querella de Gobiérna-te o a las actuaciones derivadas de dicha denuncia. Y se tendrán que limitar a aquellos que se intercambiaron entre las personas que, en cada uno de ellos, aparezcan como actuantes en relación con lo investigado. Esto supone que se incluya a la propia Mónica Oltra.
El magistrado ordena crear para ello una pieza separada y secreta. Argumenta que no puede negarse que la intervención de estas comunicaciones ofrece un "claro potencial" desde la óptica, elemental en la investigación, "de esclarecimiento de lo ocurrido con el máximo de sus circunstancias incluidas", entre ellas las personales.
Y añade que, con los criterios establecidos, se evita, como advertían las defensas, que las diligencias puedan convertirse en prospectivas y que resulten necesarias y no desproporcionadas. "Dentro de estos parámetros es posible obtener lícitamente —es decir, sin lesionar o poner en peligro injustificadamente la intimidad o el secreto de las comunicaciones de nadie— la información útil para la investigación que pudiera derivarse de las repetidas comunicaciones", señala el juez. Y sin que ello, apunta, suponga una avalancha de información que, lejos de hacer progresar la instrucción hacia su final al debido ritmo, la paralice.
El juez decide así la estimación parcial del recurso de la asociación, sobre todo tomando en consideración "que en el curso de la instrucción y por parte de algunas de las defensas de los investigados se han aportado a la causa correos electrónicos que no figuran en el expediente" relacionado con la chica abusada que sea realizó desde la Conselleria. Motivo por el que el magistrado opina que "en ningún caso cabe descartar la posibilidad" de que existan otros correos no incorporados a la causa y que pueden constituir, "no sólo elemento de cargo, sino también de descargo de los investigados".
Ahora, será un grupo de la Policía Judicial el que tendrá que determinar que sea factible técnicamente y llevar a cabo la investigación.