Según el historiador griego Heródoto, Tomiris fue la reina de los masagetas, un grupo nómada que habitaba en la región de Asia Central, es decir, lo que hoy sería parte de Kazajistán, Uzbekistán y Turkmenistán. Su historia estuvo marcada por su enfrentamiento con Ciro, conquistador de varios territorios y fundador del imperio persa. Este intentó conquistar su territorio de diferentes formas. Primero utilizó el engaño a través de una propuesta de matrimonio. Tras el rechazo, intentó embriagar a sus guerreros con manjares desconocidos; ante la negativa, capturó al hijo de Tomiris como último recurso.
La reina, al enterarse de lo ocurrido, lideró a su ejército en una grandiosa batalla contra los persas y logró una victoria rotunda. La leyenda cuenta que, tras la batalla, Tomiris ordenó que la cabeza de Ciro fuese sumergida en una bota llena de sangre y dijo: "Te di lo que tanto deseabas: sangre".
Hoy en día en Asia, nos encontramos en un entorno marcado por normas patriarcales, que limitan el acceso a la educación, el capital y los derechos laborales para las mujeres. No obstante, la situación puede variar según la zona en la que nos situemos.
"En Asia del Sur solo el 18% de las empresas son propiedad de mujeres"
Si nos centramos en Asia del Sur, según los datos del Banco Mundial, solo el 18% de las empresas son propiedad de mujeres y la brecha de género en la participación laboral sigue siendo una de las más amplias a nivel mundial. Las normas patriarcales limitan continuamente las oportunidades de las mujeres a la hora de acceder al mundo empresarial, redes de contacto y educación financiera. En cambio, en Asia Oriental, la situación es más favorable, ya que en China las mujeres representan el 30% del emprendimiento. Ahora bien, deben luchar de forma constante contra las presiones culturales patriarcales y las barreras de entrada, especialmente en el acceso al capital.
Incluso si nos centramos en países progresistas como Japón, según el Foro Económico Mundial, la representación femenina en roles de liderazgo constituye apenas el 7% de los altos cargos directivos, lo que da lugar a un entorno empresarial dominado por los hombres. A pesar de ello, Singapur ofrece un entorno más favorable para las mujeres emprendedoras, ya que se han implantado políticas de apoyo a la igualdad de género y acceso al crédito.
Como conclusión, el camino hacia la igualdad es cuestión de todos, además de una constante lucha. Para ello, podemos contar con la inspiración de Tomiris, donde a pesar de las trampas y piedras que le pusieron en el camino, demostró capacidad de liderazgo, tesón, valentía y victoria, al enfrentarse a uno de los imperios más temibles de la época. Manifestando que las figuras femeninas estamos dispuestas a desafiar, tomar las riendas de la situación y cambiar la historia.
Ahora, tenemos la posibilidad de desafiar el orden establecido, de librar la batalla de nuestra vida y derribar barreras que parecen imposibles. Lo que me lleva a pensar, si una mujer hace más de 2.500 años tuvo el coraje de desafiar a todo el sistema, ¿qué nos impide hacerlo ahora? ¿Qué es lo que pensáis que necesitamos para que más mujeres puedan liderar y decidir su destino en el mundo actual?