CASTELLÓ. El proyecto definitivo de la ampliación y rehabilitación del Ayuntamiento de la Vall d’Uixó ya está listo. Su presentación pública ha dado las claves del nuevo edificio, que son la reducción del 90% del consumo de energía primaria no renovable en su funcionamiento, la accesibilidad, la facilidad de circulación y el mantenimiento de su memoria e historia.
La alcaldesa, Tania Baños, ha presidido el acto público y ha puesto en valor que con esta actuación “se moderniza la casa de todos los valleros y valleras”. Precisamente mejorar la atención a la ciudadanía es uno de los principales objetivos ya que “ahora hay que esperar incluso en la calle por la falta de espacio”. También se gana en eficiencia al centralizar algunos de los servicios más usados en un único edificio y se recupera patrimonio “que evita que caiga en manos privadas y desaparezca, como ya ha sucedido en el pasado”.
Además de los servicios que ya se prestan en el actual edificio, tras la ampliación se incorporarán los departamentos de Urbanismo y Medio Ambiente y el archivo principal. El salón de plenos se ubicará en la planta baja y tendrá un acceso independiente, de manera que pueda acoger actos sociales, por ejemplo exposiciones, charlas o presentaciones de libros. Asimismo, estará conectado con el patio, que será el elemento de unión entre los dos edificios.
Esta zona verde se regará con agua de aljibe, en la que es una de las principales medidas de sostenibilidad del nuevo edificio. Además se instalarán sistemas domóticos, aerotermia y paneles, vidrios y tejas fotovoltaicas; y se aprovechará la luz natural y la ventilación cruzada, que junto a la sustitución del revestimiento de las paredes mejorará la climatización del edificio de forma sostenible, lo que también reducirá la sensación de ruido.
El diseño salva el desnivel entre el forjado de cada edificio a través de ascensores con acceso desde las dos bandas. Y se facilita la circulación por el interior de las instalaciones a través de un sistema de enfiladas y la yuxtaposición de salas, lo que “favorece que las personas sepan en todo momento hacia donde tienen que ir, lo que es fundamental en un espacio público”, ha remarcado Baños. La alcaldesa también ha considerado importante la recuperación de los techos y vigas originales de la antigua sede de la Schola Cantorum “para mantener la memoria del edificio y hacerlo más cálido y acogedor”.
La ampliación y rehabilitación del ayuntamiento es posible gracias al Programa de Impulso a la Rehabilitación de Edificios Públicos (PIREP), financiado por la Unión Europea a través de los fondos Next Generation EU y dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España. El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha concedido 2.854.911,66 euros y la aportación municipal será de 1.082.476,74 euros. En total, 3.939.388,40 euros para ampliar y modernizar un edificio que tiene casi 100 años y que en su parte superior tiene zonas sin uso porque están en mal estado.
Para finalizar, Baños ha puesto en valor que esta actuación también es fruto de la participación ciudadana, ya que en 2022 se realizó un proceso “para recoger propuestas e ideas, que fue muy bien valorado por la Unión Europea para otorgarnos la ayuda”. “Este era un proyecto muy anhelado por la Vall desde hace años y ahora será una realidad”, ha indicado. Y es que la previsión es licitar las obras durante el verano, de manera que puedan empezar en el último cuatrimestre del año.