VALÈNCIA (C.G./ EP). La cultura valenciana vuelve a medirse en el ‘Observatorio de la Cultura en España en 2021’, un informe elaborado por la Fundación Contemporánea que trata de hacer una fotografía anual de los principales proyectos y espacios culturales del país. En este caso, además, un informe especialmente relevante pues se trata del primer curso tras el confinamiento y cierre general de 2020, un nuevo curso, claro está, también marcado por la pandemia y las medidas sanitarias, pero en el que los espacios culturales han podido volver a tomar el pulso al público general. En el listado de las instituciones y acontecimientos culturales más importantes de la Comunitat Valenciana el Institut Valencià d’Art Modern (IVAM) recupera la primera posición, obligando al Centre del Carme a ceder un puesto con respecto al año pasado. Bombas Gens se mantiene en tercera posición, mientras que destaca Russafa Escènica (sube tres posiciones), Dansa València, el Palau de les Arts, Sagunt a Escena y la Fundación Bancaja (que sube cinco posiciones).
Algunas de las ausencias con respecto al año pasado es el Teatro Olympia, el festival de cortometrajes La Cabina o València Capital Mundial Diseño, esta última se coló en última posición en 2020 pero ha desaparecido del listado correspondiente a 2021. Entre las nuevas incorporaciones se suma la feria de arte contemporáneo de Castellón MARTE, la Filmoteca o el teatro municipal La Mutant. En este último caso, la entrada supone una palmadita en la espalda que, sin embargo, no evita su complejo presente, pues desde octubre está sin coordinación artística y este año ha renunciado a contar con programación propia ante la falta de equipo.
En el ranking nacional la presencia valenciana es, ciertamente, más limitada. De los cinco mejor puntuados cuatro son proyectos fijados en Madrid, con la única excepción del festival de San Sebastián, que ocupa la cuarta posición. La exposición Vasos comunicantes en el Reina Sofía; Pasiones mitológicas en el Museo del Prado o los proyectos en torno a la obra de Georgia O’Keefe y Magritte en el Thyssen-Bornemisza ocupan los tres primeros lugares del listado. Hay que descender hasta la posición número 22 para encontrar la primera presencia valenciana, con el Centre del Carme, que aumenta considerablemente su consideración con respecto al pasado año, donde ocupaba la plaza número 51.
Le sigue de cerca, en el puesto 27, el IVAM, del que se destacan las exposiciones de Mona Hatoum, que recibió en 2021 el Premio Julio González, o Los exilios de Renau. Los centros privados Bombas Gens y Fundación Bancaja son otros de los espacios valencianos destacados en el ránking nacional, que también suma al Palau de Les Arts, que pasa de la posición 48 a la 70. Al valorar a las ciudades españolas por la calidad e innovación de su oferta cultural en 2021, Madrid repite en cabeza seguida por Barcelona. En el tercer puesto se produce un empate entre Málaga y València (que sube dos posiciones), superando ambas este año a Bilbao, en quinto lugar.
Por otro lado, se ha preguntado a los panelistas por la variación prevista en los presupuestos de su organización o actividad profesional para 2022 respecto al año 2021. El sector apunta a una progresiva recuperación, con un crecimiento medio previsto del 5%, el más alto desde el inicio de esta serie en 2010. Esta previsión es sensiblemente mejor para los panelistas del sector privado (6,2%) pero mucho peor para los profesionales independientes (0,8%). Hace un año, se pronosticó un descenso medio del 34,5%, según el informe.
El Observatorio de este año ha querido pulsar además el grado de conocimiento, compromiso y avance de las organizaciones culturales respecto a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) fijados por la UNESCO en la Agenda 2030. Así, el panel ha valorado nivel de conocimiento y el del equipo directivo en su organización profesional, sobre los citados objetivos, con una valoración media de 7,45. El resultado es algo superior en el sector público (7,77) y más de un punto inferior entre los profesionales independientes (6,36).
Entre los objetivos donde más creen poder contribuir, destacan la igualdad entre géneros (9,54), la educación de calidad para todos (8,94), sociedades justas y en paz (8,27), ciudades inclusivas y sostenibles (7,83), salud y bienestar (7,55), producción y consumo sostenibles (7,51) y crecimiento sostenible y trabajo digno para todos (7,46). El documento de este año está basado en las opiniones de 358 miembros de un panel de profesionales de la cultura, que han respondido en diciembre de 2021 a un cuestionario valorando como cada año lo mejor de la oferta cultural y, en esta ocasión, el compromiso del sector cultural con los objetivos de desarrollo sostenible.