VALÈNCIA. La selección española de fútbol olímpico llega a París con un objetivo claro: ganar el oro. Así lo transmiten, sin tapujos, sus integrantes; como semanas atrás hablaban de victoria los internacionales de la Eurocopa. Una medalla que España solo ha logrado una vez, en Barcelona 1992, y que se le escapó en el minuto 108 en Tokio 2020.
El equipo dirigido por Santi Denia se concentró el pasado 1 de julio para afrontar una pretemporada que les llevase al torneo olímpico de París. 16 días en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, alternando dobles sesiones con un único entrenamiento, y seis días en Francia, con un partido de preparación contra Estados Unidos (1-1) antes del debut contra Uzbekistán.
Un día 24 de julio en el que España abre, junto al Argentina-Marruecos, el telón del fútbol olímpico y que el cuerpo técnico tiene marcado en rojo en el calendario. Siempre es importante el primer partido, pero más aún en un torneo tan corto como las olimpiadas, es el mensaje entre los responsables del equipo.
Partido frente a Uzbekistán que marcará el inicio de un camino que tiene en fase de grupos a República Dominicana -entrenada por el español Ibai Gómez- y Egipto en fase de grupos.
En cuartos, Japón, Paraguay, Mali o Israel; con Argentina o Francia, a priori, favoritas junto a España, aguardando en unas potenciales semifinales.
Este es el potencial camino de España hacia la final del viernes 9 de agosto en el Parque de los Príncipes.
Una final a la que ya llegó España en los pasados Juegos Olímpicos de Tokio, tras 20 años sin éxitos en las olimpiadas.
Medalla de plata en Tokio, tras el gol del brasileño Malcom en el minuto 108 que supuso el tercer segundo puesto para España, tras Sídney 2000 y Amberes 1920.
Y el único oro, en Barcelona 1992. Un torneo con pleno de victorias, seis de seis, 14 goles a favor y dos en contra; estrenando de forma inmejorable la limitación sub-23 que aún se mantiene; eso sí, con tres excepciones.
Para París 2024, Santi Denia usó esas tres plazas para jugadores que se ganaron el billete olímpico en el pasado Europeo sub-21 y que, además, ganaron europeo sub-17 y sub-19: Juan Miranda, Sergio Gómez y Abel Ruiz.
Además, el primero se convertirá, junto a Eric García, en los únicos futbolistas españoles en repetir cita olímpica desde que se implantó el torneo sub-23.
Convocatoria de Santi Denia en la que demostró aprender del pasado. Luis de la Fuente convocó para Tokio a seis futbolistas que disputaron la Eurocopa, y el cansancio se notó en sus piernas; especialmente en Pedri, quien jugó 64 partidos aquella temporada.
Para esta ocasión, solo Álex Baena y Fermín López repiten torneo de selecciones. Y ambos, con poco protagonismo en la Eurocopa: 27 minutos Baena y 29 Fermín.
Ni Lamine Yamal ni Nico Williams, ambos titulares en el torneo en Alemania y en edad sub-23 doblarán torneo a pesar del salto de calidad que daría al equipo contar con dos de los mejores extremos del momento.
Y aún así, España lleva un equipo de plenas garantías. De los 22 convocados -18 fijos más cuatro reservas-, cinco forman parte del once más valioso antes de empezar el torneo: Pau Cubarsí, Miguel Gutiérrez, Pablo Barrios, Fermín López y Álex Baena. La siguiente selección en este aspecto es Francia, con cuatro.
Un equipo con el objetivo del oro entre ceja y ceja. Ese que se le resiste desde Barcelona 1992 y que rozaron en Sídney 2000 y en Tokio 2020.