VALÈNCIA. España y Alemania se enfrentan esta tarde buscando un hueco en las semifinales del torneo aunque bien pudiéramos hablar, sin duda alguna, de la final anticipada del torneo. Favorito y anfitrión se enfretan en un capítulo futbolístico de "Juego de Tronos" en Stuttgart.
Si bien cabe recordar que el primero que ha alzado la voz sacando los pies del tiesto es el ex guardameta germano Jens Lehmann, al haber acusado al equipo español de inexperto y de ser casi una escuadra de juveniles. Precisamente el Lehmann que en la final de 2008 sacó de dentro de la portería el balón impulsado por Fernando Torres en la final que coronaría a España como campeón del torneo por segunda vez, no muy lejos de Alemania, en Austria. Quizá el arrogante guardameta teutón aún no ha digerido ver como el once entrenado entonces por Luís Aragonés les pasó por encima.
España tiene de qué presumir cuando se enfrenta a Alemania. Sólo una derrota en Euros y Mundiales desde que (eso sí) nos pintarán la cara en casa en el 82; ahora es momento de devolverles el golpe en su feudo. La cabeza de Maceda que les sacó derrotados de la Euro del 84, los empates en los mundiales del 94 y de 2022 y las victorias en la final del 2008 con el gol de Torres y en las semis del mundial de 2010 con el testarazo de Puyol, sumado a su actual estado de forma, hacen de España un conjunto que -más allá del resultado final- le puede jugar de tú a tú a los locales.
Sin embargo España también tiene puntos oscuros. El primero de ellos, que se le atragantan los anfitriones. Francia en el 84, Alemania en el 88, Inglaterra en el 96, Corea en el 2002... Segundo que no son tantas las ocasiones en las que España a derrotado a los teutones en su cancha (aunque algún empate ha cosechado en los últimos años).
Y tercero, que en la carrera por ser un bocazas Alemania había sacado ventaja con las declaraciones de Lehmann, pero España igualó el miércoles la balanza en ese terreno con las de Joselu. Las palabras del delantero diciendo que van a jubilar a Toni Kroos recuerdan a una portada de infausto recuerdo del diario "Marca" en el que se decía en la previa de los octavos de final del mundial de Alemania 2006 que iban a jubilar a Zidane. Esa tarde Francia barrió del campo a España con un Zizou soberbio. Parece que no hemos aprendido nada.
Aún con todo y con eso, la batalla floral de reconocimiento de virtudes entre ambos bandos ha sido la nota predominante. Y sobre todo España sabe que vuelve a estar ante una gran oportunidad. Si es capaz de sacar de su camino a la anfitriona, acumulará muchas papeletas para llegar a alzar el trofeo.
Para ello, los once elegidos por Luís De la Fuente deben estar acertados. Y para ese once, parece haber más debate periodístico que duda del seleccionador sobre si la mediapunta debe seguir siendo para Pedri o para Dani Olmo. El resto será el equipo esperado que se sostiene sobre cuatro pilares inamovibles: Rodri, Fabián, Nico Williams y Lamine Yamal.
Con todos esos precedentes, el once es el que ya todos sabemos de memoria con Unai Simón bajo los palos; Carvajal en la derecha, Laporte y Le Normand en el eje de la zaga y Cucurella a la izquierda. En el centro del campo Rodri, Fabián y Pedri, y en la punta del ataque Lamine Yamal por la derecha, Nico Williams por la izquierda y en el centro, Álvaro Morata.
Extramotivada por ser la anfitriona, jugando en estadios llenos de camisetas blancas y gargantas entregadas, con más presión que ninguna otra por la misma razón y con la última victoria de partido oficial ante España en 1988 como ejemplo a seguir, Alemania encara los octavos de final con pocas dudas en el once, pero con la mirada puesta en un jugador, Toni Kroos, que podría estar ante su último partido como futbolista profesional.
Él está convencido de lo contrario -"no creo que sea mi último partido", dijo en ruda de prensa el miércoles- y hará lo posible para evitarlo. ¿Cómo? Siendo, como siempre, el cerebro de Alemania. Líder indiscutible en el centro del campo, su vuelta a la selección ha supuesto una mejoría notable. Es un equipo más equilibrado y más peligroso gracias a Toni, acompañado en la medular por Andrich. También más efectivo, siendo el equipo más goleador en lo que va de torneo con 10 dianas, perseguido por las 9 de España. Si la Roja no logra ponerle freno, estará en problemas.
Solo la presencia de Leroy Sané o de Florian Wirtz inquieta a la afición germana, descolocada en ese sentido, dividida entre ambas opciones para el once. Parte con cierta ventaja en el once un Sané que ya ante Dinamarca, en los octavos de final, le ganó la partida a Wirtz, suplente pero agitador desde el banquillo. Intentará aprovechar Julian Nagelsmann la velocidad de Sané para convertir en una amenaza las posibles contras o jugadas en largo para evitar la alta presión de los de Luis de la Fuente.
El que es intocable en el once es Jamal Musiala, peligro principal de la 'Mannschaft', condicionado a caer al lado izquierdo de la ofensiva germana con la titularidad de Sané, emparejado con Carvajal, pero con la libertad absoluta de aparecer entre líneas y generar superioridades con Ilkay Gundogan, fijo como enganche, amenaza constante en el borde del área, experto llegador y oportunista del gol.
Con Kimmich en el lateral derecho, en una vuelta algo agridulce al lateral derecho la no ser tan efectiva, será Raum el que actúe en el carril izquierdo, elegido por delante de Mittelstadt. En el centro de la zaga, con Rudiger como mariscal, convertido en un arma secreta de la construcción del juego de Nagelsmann, pues es el central que más pases filtra al último tercio con éxito (93%), será Tah el que se haga con el puesto titular en lugar de Schlotterbeck.
Arriba, el encargado del gol volverá a ser Havertz, elegido siempre por delante de Fullkrug. En la segunda mitad, Nagelsmann podrá contar con una de sus cartas más usadas en lo que va de torneo, un Emre Can que llegó a la convocatoria de casualidad, pero que se ha convertido en el jugador número 12. Acusando unas molestias musculares estos últimos días, se entrenó con normalidad y estará disponible para el trascendental duelo.
En Stuttgart, ante casi 55.000 aficionados, en su gran mayoría locales, Alemania buscará la redención, volver a ganar a España tras 36 años sin hacerlo en partido oficial. Caer en cuartos de su propio torneo volvería a ser otra mancha negra en el historia reciente de una selección que quiere volver a lo más alto.
- Alineaciones probables:
España: Unai Simón; Carvajal, Laporte, Le Normand, Cucurella; Rodri, Fabián, Pedri o Dani Olmo; Lamine Yamal, Nico Williams y Morata.
Alemania: Neuer; Kimmich, Rudiger, Tah, Raum; Kroos, Andrich; Sané o Wirtz, Gundogan, Musiala; Havertz.
Árbitro: Anthony Taylor (Inglaterra).
Estadio: Stuttgart Arena.
Hora: 18.00.