El pasado 27 de marzo Pedro Sánchez presentó el programa electoral del PSOE para las próximas elecciones, 110 compromisos con la España que quieres. El partido Socialista ha optado por no acompañar estos compromisos de una memoria económica que permita analizar su viabilidad. Por lo tanto, al igual que ya pasaba con Vox, te las puedes creer o no.
En esencia, las propuestas económicas se fundamentan en el aumento del gasto público, de la inversión, de los impuestos y posponer al 2025 una solución para la Seguridad Social y su déficit.
Centrándonos en las partidas de gastos e inversión, los compromisos abarcan diferentes aspectos. Por el lado de la educación se busca un Pacto Estado para que la inversión sobre el PIB llegue al 5%, la gratuidad de las escuelas infantiles de 0 a 3 años, en la gratuidad de la primera matrícula de grado universitario. España, en los peores años de la crisis ha mantenido una inversión sobre el PIB que ha rondado entre el 4.2-4.4 %.
Las startups y las nuevas tecnologías también tienen sus compromisos específicos. Para ellas, incentivos fiscales que mejoren su financiación y su desarrollo, además, una red de incubadoras y aceleradoras estatales.
Para los trabajadores, retoques a la reforma laboral y aumento progresivo del Salario Mínimo Interprofesional. El Régimen Especial de los autónomos será modificado para que se cotice en función de los ingresos. Esta medida, parece justa e iguala a los autónomos frente a los trabajadores por cuenta ajena, ya que ambos pagarían en función de los ingresos, pero se les ha olvidado el pequeño detalle de que los autónomos no cobran todo lo que facturan ni mucho menos cada final de mes. Sería bueno que explicaran cómo se desarrollaría esta medida sin descuadrar aún más la caja de los autónomos.
El mundo rural no se queda atrás, el Partido Socialista propone planes y estrategias, muchas. Principalmente Reto demográfico y Mundo Rural, con incentivos para el turismo rural y energías renovables. También la inversión en los corredores del Mediterráneo y Atlántico.
Por lo que refiere a bienestar y pensiones, implantar un ingreso mínimo vital, restablecer la renta básica de emancipación y la revisión del copago farmacéutico. Las pensiones vuelven a revalorizarse al IPC y el factor de sostenibilidad se aplicará en función del tiempo político que se viva en cada momento. Si las encuestas van mal, se subirán; y si van bien, se mantendrán. La solución que han pensado para el déficit de la Seguridad Social es que lo vamos a pagar progresivamente vía presupuestos del Estado, es decir, más impuestos.
Falta saber lo que va a costar todo este conjunto de medidas, algo que se nos ha obviado. Quizá para evitar un susto mayúsculo al ver la factura
Estas son, a grandes rasgos, las principales medidas sobre gastos e inversiones para la próxima legislatura. Falta saber lo que va a costar todo este conjunto de medidas, algo que se nos ha obviado. Quizás para evitar un susto mayúsculo al ver la factura. Afortunadamente han dedicado dos páginas con pocas cifras, ninguna de hecho, pero con compromisos que nos pueden dar una idea del montante final. Para la fiscalidad, se habla de armonización a nivel europeo, que dicho así parece estupendo, pero significa que la presión fiscal debe incrementarse del 38% hasta el 43-44%, y por si siguen existiendo dudas del significado, aumento de la recaudación de unos 60.000 millones de euros.
Pero para que tengamos claro el orden de magnitud del que estamos hablando, en el año 2017, según el informe anual de la Agencia Tributaria, la recaudación por IRPF ascendió a 77.000 millones de euros, la recaudación por Impuesto de Sociedades fue de 23.000 millones de euros y la recaudación por IVA fue de 63.000 millones. Desagregados, la principal diferencia entre la media europea y España, es que ellos recaudan más por IVA e IRPF. Ésta debe ser la forma de Pedro Sánchez de decirnos que va a subirnos los impuestos, limpia, elegante, armonizada.
La España que quieres necesita mejorar, rozando lo poco creíble, aumento de los gastos y aumento de la recaudación vía impuestos, en un contexto donde la incertidumbre está provocando la corrección de los principales indicadores y la reducción de las estimaciones para el crecimiento económico. La España que quieres, recuerda a la España de ZP, aquella del 2008 que desaceleraba aceleradamente, pero que no era crisis.