CASTELLÓ. Que el Ayuntamiento de Torreblanca plantee la modificación del Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) y del Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) del Prat, para que tengan cabida actividades de ocio que la normativa actual no permite, no es apostar por la sostenibilidad, a juicio de Gecen.
Los servicios ambientales, los beneficios que las personas obtienen de los ecosistemas, que el Prat proporciona también son cuantificables a nivel económico por lo que la nueva oportunidad económica que debe marcar la sostenibilidad del espacio protegido debe enfocarse en la restauración medioambiental. El pago por los servicios ambientales (PSA) que repercuta en las personas que contribuyan a la preservación, conservación, restauración y gestión del Prat debe ser una línea prioritaria que la administración autonómica debe establecer. La complicidad del pequeño propietario con terrenos en el Parque Natural es fundamental y su implicación necesaria.
Igual que es necesario que el Prat sea resiliente ante el cambio climático y Costas pueda gestionar el litoral del Parque con garantías contando con el espacio necesario para ello. El Prat, como la mayor parte del litoral mediterráneo, está en regresión y necesita de actuaciones urgentes que afronten el problema.