CASTELLÓ. La borrasca Gloria deja situaciones destacadas a lo largo y ancho de la provincia de Castellón. Algunas de ellas se han vivido en el puerto de Castellón, donde los remolcadores han tenido trabajo extra. Debido a la fuerza del viento y del oleaje, dos buques amarrados en la dársena sur rompieron este lunes varios de los cabos que los amarraban al muelle y, con el fin de que no se partiesen el resto y las naves quedasen a la deriva, sus responsables solicitaron la asistencia de los remolcadores con el fin de estabilizarlos.
La situación más alarmante se produjo en los atraques de BP, ubicados en el muelle de líquidos de la dársena sur, donde el petrolero Ionic Anassa vio cómo se partían cinco de los cabos que le mantenían amarrado a tierra. Esto motivó que tres de los cuatro remolcadores que operan en PortCastelló, el Vb Muscle, Vb Supernacho y el Boluda Set, trabajasen durante casi todo el día para empujarlo y mantenerlo adosado al dique de cierre de este recinto portuario.
Esta situación extraordinaria, que los propios trabajadores de los remolcadores han vivido en contadas ocasiones, también se dio en la terminal de Portsur, donde otro remolcador, el Vb Matador, tuvo que asistir al buque granelero Amoy Action, que partió uno de los cables que lo amarraba a tierra, aunque en este caso la asistencia fue más breve. Las fuentes señalan que también en los puertos de València y Sagunto se dieron situaciones parecidas, con los remolcadores trabajando a destajo.
Estas fuentes conocedoras detallan además que para llevar a cabo estas labores de emergencia, todos los remolcadores "duplicaron o triplicaron" los cabos que habitualmente utilizan para amarrar a los barcos y realizar su labor. Esto se produjo debido a que el puerto de Castellón sufrió olas "de entre seis y ocho metros", lo que motivó que todas las operativas quedasen suspendidas, detallan fuentes de la Autoridad Portuaria.
Otras de las situaciones destacadas se dieron en el aeropuerto de Castellón, que recibió dos vuelos más de lo habitual en los lunes. Además de atender la operativa con Londres operada por Wizz Air, dos aviones que debían aterrizar en Alicante y fueron derivados a Manises debido a la climatología fueron asimismo desviados a Castellón.
Se da la circunstancia de que las operativas corresponden a conexiones de Alicante con Budapest y Bucarest que realiza Wizz Air, que opera estas mismas rutas desde el aeropuerto de Castellón.
