Iniciativa se enfrenta a una crisis que puede determinar el futuro de Compromís

VALÈNCIA. Las aguas bajan revueltas en Compromís. Tal y como había venido informando este diario, la coalición valencianista se encuentra sumida en un atmósfera enrarecida tras los últimos enfrentamientos entre sus dos formaciones principales: Més e Iniciativa. El motivo, distintas discrepancias respecto a la distribución de cargos en Les Corts y la elaboración de las listas, con mención destacada a la candidatura al Senado, que provocó la amenaza de denuncia del ya exparlamentario Carles Mulet (Iniciativa) al considerar que se había roto el pacto al situar en su puesto a Enric Morera (Més).

Este viernes, no obstante, se hizo público otro giro de guión que puede afectar al futuro de Compromís. El exvicealcalde en el Ayuntamiento de València Sergi Campillo y la exconcejal Luisa Notario, entre otros militantes, anunciaban su solicitud de baja de Iniciativa por desavenencias con la dirección actual mediante una carta que ponía sobre la mesa similares argumentos. Uno de ellos, la necesidad de que Compromís "avance hacia una federación de partidos o una estructura similar estable", una reivindicación que desde Més -la pata mayoritaria- se viene haciendo desde hace años y cuyo debate debería abordarse en Iniciativa en una asamblea convocada para tal efecto en febrero del próximo año. De hecho, esta es una de las quejas de Campillo en su misiva, puesto que esta cuestión ya se aprobó con anterioridad y ahora debe debatirse por "enésima vez".

De esta manera, el adiós del exvicealcalde de València a Iniciativa -aunque se mantendrá como adherido en Compromís- y de otros cargos como Luisa Notario, evidencian la fuerte crisis en el partido que otrora lideraba Mónica Oltra y que puede determinar el futuro de la coalición valencianista. El descontento con la dirección, focalizado principalmente en la figura del portavoz de Iniciativa y diputado nacional, Alberto Ibáñez, se ha hecho más visible en los últimos tiempos especialmente desde el sector más próximo al histórico cofundador del partido Pasqual Mollà, pero también por parte de otros dirigentes proclives a avanzar hacia un partido único, en línea coincidente con Més. 

No obstante, en la otra orilla ven estas bajas más como una mera cuestión de carácter más individual y estratégico. Así, preguntado por estas fugas en Iniciativa, el portavoz Alberto Ibáñez prefirió no avivar la polémica. "Al margen de las estrategias personales de cada uno, el debate sobre el futuro de Iniciativa en Compromís tendrá lugar en una asamblea fijada para finales de febrero. Un proceso que previamente se abordará en municipios y comarcas para elaborar una ponencia que saldrá de la Mesa Nacional. Esta hoja de ruta fue aprobada semanas atrás con el 85% de respaldo en la dirección", argumentó, para añadir: "Es necesario ser prudentes, más cuando por primera vez, estamos implicados en la gobernabilidad de España".

Menos diplomáticas se mostraron otras fuentes de Iniciativa consultadas por este diario, que mostraron su malestar por la marcha de Campillo y Notario. "Ocuparon un puesto en las listas al Ayuntamiento por la cuota de Iniciativa. Campillo ya es concejal y Notario podría serlo pronto. Para conseguir el acta sí les gustaba Iniciativa y tres meses después, parece que ya no les gusta. Lo lógico sería entonces que renunciaran a sus puestos", afirmó un cargo del partido, que consideró que estos movimientos están dirigidos a buscar un acercamiento a Més, la pata mayoritaria de Compromís.

En este sentido, distintas fuentes de Iniciativa señalaron que se producirán más anuncios de bajas en el partido en los próximos días, probablemente de ex altos cargos del Gobierno valenciano. Un goteo que, para algunos, implica el deseo de "hacer daño" al partido y dejarlo en una situación de debilidad de cara a futuras negociaciones con Més sobre el camino que debe adoptar Compromís. Históricamente, desde Més (antiguo Bloc) se ha apostado por dejar el formato de coalición y tratar de fusionarse en una sola fuerza política, mientras que en Iniciativa se han mostrado más reacios al considerar que podrían quedar diluidos por ser inferiores numéricamente.