CASTELLÓ. En agosto de 2021, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) confirmó en un informe encargado por la propia Comisión Europea lo que el sector citrícola venía denunciando: que el denominado enfoque de sistemas implementado por Sudáfrica desde 2018 para evitar la entrada y propagación en Europa de la falsa polilla (Thaumatotibia Leucotreta) no sirve e incumple la normativa comunitaria. Y esto es así porque el conjunto de estrategias de manejo integrado que la UE permite aplicar a Sudáfrica en cítricos para controlar la falsa polilla, según se acreditó científicamente, están muy lejos de garantizar la ausencia de la plaga que la propia normativa exige explícitamente.
Todo esto lo destaca la interprofesional citrícola española Intercitrus, que recuerda que el Comité Permanente Fitosanitario de la UE, del que forman parte la Comisión y los representantes fitosanitarios de los 27 Estados miembros, están debatiendo desde hace meses las medidas a aplicar.
En este sentido, Intercitrus destaca que los rechazos acumulados en 2021 en los puertos europeos, hasta noviembre, ya suman otra cifra récord de 29 partidas infectadas con falsa polilla (18 de Sudáfrica, 10 de Zimbawe y 1 de Israel). En base a esto la interprofesional considera que, tratándose de una plaga regulada como cuarentenaria y "prioritaria" por su impacto económico y medioambiental, la única alternativa que le queda a Bruselas es imponer un cold treatment en tránsito para estas importaciones.