CASTELLÓ. La edición inaugural de la Carrera de las Empresas de Castellón ha iniciado sus prolegómenos con los primeros entrenamientos preparatorios. La prueba, que se disputa el 7 de mayo y que está dirigida a todo el tejido empresarial de Castellón, cuenta entre sus embajadores con un campeón de Europa de atletismo, Jesús España. El fondista madrileño ha estado presente en esta primera sesión de trabajo y ha compartido sus conocimientos sobre cómo hacer un buen entrenamiento y evitar lesiones. Antes de ese entrenamiento, España charló con Castellón Plaza para ofrecer sus impresiones sobre una carrera en la que también tomará parte.
Pregunta: ¿Qué le ha animado a participar en este proyecto?
Respuesta: Me lo propuso Andrés Vera, con el que me une una gran amistad y estoy encantadísimo de poder ayudar y participar en la carrera. Por un lado me parece una idea magnífica aunar el deporte y, en este caso el atletismo, que es lo que más me gusta, con la empresa. Creo que la mentalidad y la filosofía de los atletas y las empresas son bastante parecidas porque el espíritu de superación y el compañerismo son cosas comunes en el corredor y el trabajador. Además, al empresario le interesa que sus trabajadores hagan deporte y sean físicamente activos porque van a ser gente más sana y más productiva.
P: ¿Qué papel va a tener en la carrera?
R: Tenemos pensado que yo dirija un pequeño calentamiento para el que quiera el día de la prueba, enseñando los secretos de cómo calentamos los atletas de élite antes de una carrera y animo a todo el mundo a que se inscriba. No solo por salud, sino por el componente competitivo. Pueden tener un pique sano con un compañero que esté en otro equipo de la misma empresa o de otra y al final son muchos ingredientes buenos que hay que aprovechar para apuntarse y participar.
P: ¿Transmitir los valores del atletismo es una motivación extra en un proyecto de esta naturaleza?
R: Por supuesto. Para mí, el atletismo es el mejor deporte y el más educativo para niños y adultos y tiene la facilidad de que en cualquier sitio lo puedes practicar. Incluso si te vas de viaje por trabajo, puedes llevarte unas zapatillas en tu maleta, las sacas y sales a correr en cualquier parque que te pille cerca. Es una manera de desconectar y evadirse de todo y es de muy fácil acceso.
P: ¿Es muy diferente preparar a atletas de élite que a trabajadores de empresas?
R: Parece que es muy diferente, pero al final no lo es tanto. El atleta de élite lleva todo al extremo, entrena muchísimo, se cuida un montón y toda su vida gira en torno a eso, mientras que para el trabajador es una especie de válvula de escape. Su vida laboral y familiar es la que ocupa su mayor tiempo. Pero, una vez que te pones a correr, la mayor lucha de los atletas, sea cual sea su nivel, es consigo mismos. Pasa con los atletas de élite y el corredor popular, que busca mejorar su propia marca y creo que esa pelea nos gusta a todos. La satisfacción de hacer una marca personal es igual, sea cual sea tu nivel.
P: ¿Qué le ha resultado más gratificante en su carrera, al margen de los resultados?
R: La gente que he conocido en el mundo del atletismo, que es ahora parte de mi entorno. A mis amigos y a mi mujer los he conocido gracias al atletismo. Por otro lado, está la sensación de bienestar que me aporta el correr. Yo me enamoré del atletismo desde niño cuando empecé a practicarlo por la sensación de libertad que me aportaba y sobre todo recuerdo la sensación de hacer un entrenamiento y conseguir mi marca personal aunque fuera por una décima e irme a casa con una gran sonrisa y la satisfacción de haberlo conseguido, aunque no me viera nadie. En la competición estás expuesto a los focos y tienes el reconocimiento externo, pero tu propio reconocimiento interno de conseguir algo que te costaba, es lo principal que te llevas como atleta.
P: ¿Qué le sigue aportando el atletismo lejos de los focos?
R: A mí correr me hace ser mejor persona. Si no corro, no hay quien me aguante. Si estoy dos días sin correr, mi mujer me dice que corra porque me calma y me hace ver las cosas con perspectiva.
P: ¿Cómo ha evolucionado el interés por el atletismo desde que se inició en este deporte?
R: El mundo del atletismo ha crecido muchísimo. Cuando yo empecé ya se iniciaba un boom y ya había más gente, pero los corredores anteriores a mí me recordaban que les veían correr con mallas en algún sitio y les miraban como bichos raros. Ahora se ve con bastante normalidad que la gente haga deporte y se interioriza como algo importante en el día a día. Además, saben que practicarlo les aporta salud emocional y física y de ahí este boom que no para. Parecía que era una burbuja que iba a explotar, pero cada vez hay más gente que corre y hay más carreras.