CASTELLÓ. Sandra Julià ha sido la gran derrotada de la noche. Ciudadanos, con los peores registros electorales de su historia en la provincia de Castellón, ha perdido el escaño en el Congreso. La debacle, general en el conjunto del territorio español, ha supuesto un duro golpe para la formación naranja, y muy especialmente para su secretaria de Organización.
Julià, diputada en 2016 con 43.994 votos y el pasado 28A con 50.897, ha sumado tan solo 20.230 sufragios. Apenas 2.000 más que la quinta formación más respaldada, Més Compromís (18.096).
La excongresista ha dado la cara y ha asegurado que "no nos vamos a esconder, son unos malos resultados y hay que hacer autocrítica y trabajar desde ya por recuperar la confianza de los españoles y de los castellonenses".
En este contexto, Julià ha querido dar la enhorabuena "al partido más votado. Agradecer a los afiliados, simpatizantes, y a todos los que han vuelto a confiar en Cs. También a los españoles que han participado y a quienes han hecho posible que la jornada electoral haya transcurrido con normalidad
"Desde Ciudadanos Castellón lamentamos no poder seguir defendiendo a los castellonenses desde el Congreso pero respetamos su decisión y lucharemos por recuperar su confianza", ha concluido.