La CHJ da la puntilla al PAI de Benicàssim Golf, que preveía un campo, tres hoteles y 3.000 viviendas

CASTELLÓN. La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) ha dado la puntilla al Plan de Actuación Integrada Benicàssim Golf, que contemplaba en un primer momento en el linde sur de este municipio un campo (que debía diseñar el fallecido Severiano Ballesteros), tres hoteles de cuatro y cinco estrellas y 3.000 viviendas. La CHJ determina en su proyecto de adecuación ambiental y mejora de la inundabilidad en la marjalería del Cuadro de Santiago que esta zona, catalogada como humedal, tiene que estar rodeada al sur y el este por taludes de entre 2 y 2,5 metros de altura que retengan el agua necesaria para recuperar la zona húmeda, que alberga continuos bombeos desde 1977, cuando se instalaron los primeros sistemas de drenaje. 

Quedan así enterradas las últimas posibilidades del consistorio benicense de llevar a cabo este proyecto, que abarcaba 2 millones de metros cuadrados, y en el que había insistido a pesar de que en diciembre del 2012 el Tribunal Supremo determinó que se debía proteger la zona. El Ayuntamiento había tratado de redefinir el PAI, con una ampliación de las zonas verdes, pero ahora se acaba de hacer evidente que el proyecto de golf "no encaja" en las nuevas especificaciones, reconoce la alcaldesa Susana Marqués. Quedan así en nada las reparcelaciones que ya se habían llevado a cabo en la zona. Eso sí, la primera edil señala que habrá "que hacer otro planeamiento urbanístico", en el que van a tratar de encontrar un encaje a una parte del PAI "si técnica y jurídicamente se pudiera aprovechar". 

Algo complicado, al estar declarado la mayor parte del PAI como zona no urbanizable de especial protección, como ratificó el Supremo en el 2012. Sí se podrá edificar, señala Marqués, en los sectores 5 y 6, situados entre el camino Serradal y la calle Doctor Fleming, más próxima a la playa, donde las obras que determina el estudio permitirán "resolver los problemas de inundabilidad, con lo que se podrá construir vivienda". 

Solución a las 800 familias ya residentes

Además, el estudio que ha redactado durante poco más de un año la empresa Evren permite también conocer los pasos que habrá que dar para "para evitar las inundaciones en las viviendas de más de 800 familias y proteger, al mismo tiempo, el humedal y recuperar su ámbito natural", apunta Marqués. Los trabajos, como ya se ha dicho, consistirán en el alzamiento de taludes que paren el agua y eviten su llegada a las casas. Esto también comportará que se tenga que alzar los caminos de la zona, como el de la Ratlla. 

Para acometer las obras no hay una fecha prevista, como tampoco para la paralización de los bombeos, algo que la alcaldesa benicense señala que se llevará a cabo "lo más pronto posible". Según Marqués, "el propio nivel freático", una vez pare el drenaje, con el aumento de la lámina de agua en esta zona húmeda, a la que vierten los barrancos de la Ratlla, la Parreta y Sigalero, será el que marcará "cuando se debe llevar a cabo los trabajos". 

Para ello desde el Ayuntamiento van a buscar las ayudas y la financiación necesaria. En este sentido, la alcaldesa espera "que las administraciones superiores se comprometan con los vecinos de Benicàssim y nos permitan desarrollar lo más pronto posible esta solución hidráulica".