La editorial Rubio analiza los cinco orígenes de los problemas matemáticos de los niños

26/11/2019 - 

CASTELLÓ. Si hay que elegir la asignatura cuya enseñanza provoca más dolores de cabeza en niños, padres y profesores, la respuesta es clara: matemáticas. No es ni un tópico ni una suposición, se trata de una dificultad probada que reside en factores concretos. El aprendizaje de esta materia exige a los niños llevar a cabo relaciones en el plano de lo posible, crear significados abstractos y codificar y descodificar símbolos, tal y como apuntan los expertos pedagogos de la editorial valenciana, con origen en Segorbe, Rubio.

Una vez demostrado este grado de complejidad, "queda claro que centrarse en una única causa para resolverlo supone un error" explican los expertos. Es muy importante concretar las dificultades de aprendizaje más comunes en la enseñanza primaria, tal y como señalan desde la editorial:

El primer obstáculo es la Discalculia, una dificultad de aprendizaje de origen neurobiológico que afecta específicamente a las matemáticas y dificulta la comprensión de los cálculos matemáticos. Los niños que la padecen no interpretan esta asignatura de la misma forma que sus compañeros, por lo que necesitan una enseñanza adaptada a sus necesidades.

De hecho, la discalculia se divide en seis tipologías:

Discalculia verbal: Se refiere a la dificultad para nombrar números y cantidades para usar los términos y las relaciones.

Discalculia practognóstica: Las dificultades se centran en la enumeración, comparación, o manipulación de objetos matemáticos.

Discalculia gráfica: Provoca dificultades en la escritura de símbolos matemáticos.

Discalculia léxica: Hace referencia a los problemas para leer símbolos matemáticos.

Discalculia ideognóstica: Afecta a la capacidad de hacer operaciones mentales y comprender conceptos matemáticos abstractos.

Discalculia operacional: Altera la ejecución de operaciones y cálculos numéricos.

La Acalculia, a diferencia del resto, se trata de un trastorno provocado por una lesión cerebral, por lo que no se considera que las personas que la padecen tengan una dificultad de aprendizaje. De hecho, consiste en la alteración de las habilidades y el procesamiento matemático, por lo que a efectos prácticos supone una dificultad para los niños que en muchos casos no está detectada.

El tercer factor que complica la clase de mates de muchos niños es su desarrollo cognitivo. Este va de la mano del aprendizaje de la asignatura, por lo que la maduración neurobiológica particular de cada persona marca el ritmo de su aprendizaje.

La cuarta dificultad también se refiere a un proceso evolutivo: la estructuración de la experiencia matemática. En esta asignatura, los alumnos apoyan unos conocimientos sobre otros, por lo que, si han quedado competencias por asimilar, los aprendizajes posteriores tendrán una dificultad extra.

Por último, las dificultades en la resolución de problemas, el clásico obstáculo en el aprendizaje matemáticoEste frecuente impedimento se basa en la comprensión lectora, ya que la interpretación del problema requiere de una serie de habilidades lingüísticas para asimilar conceptos y procesos como la aplicación de reglas o traducción de un lenguaje a otro.

Desde la editorial Rubio intentan "dar respuesta a estas dificultades". Precisamente para este último caso en el que los niños no fallan en la ejecución sino en la comprensión, representación y selección de operaciones, la Colección completa Competencia lectora de Rubio se ha ideado para tratar este problema. Respecto a los problemas de ejecución relacionados con el cálculo, la editorial pone a disposición de los niños las herramientas perfectas para superar sus dificultades matemáticas: sus colecciones de Competencia matemática y de Operaciones y Problemas.


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