CASTELLÓ. La Federación de Asociaciones de Familias de Alumnado (FAMPA) Castelló-Penyagolosa ha organizado una mesa redonda en el IES Sos Baynat de Castelló para analizar la nueva Ley de Educación Valenciana o Ley de Libertad Educativa. El acto contó con más de medio centenar de asistentes, entre familias, entidades y personal docente, y puso de manifiesto las preocupaciones y retos que esta normativa plantea para el sistema educativo, según han indicado desde la Fampa.
En la mesa redonda han participado Vicent Pitarch, filólogo y sociolingüista valenciano; Zulaika Agustí, presidenta de la Junta de Personal Docente de Castelló, miembro del sindicato STEPV y maestra; Pablo Sendra, presidente de la Ampa del CEIP Tombatossals, Francesc Mezquita, inspector de Educación; y Violeta Tena, representante del colectivo Famílies pel Valencià.
Durante el debate, los y las ponentes ofrecieron perspectivas complementarias sobre la nueva ley, que sustituye la anterior normativa de plurilingüismo e introduce la elección de la lengua vehicular de la enseñanza. En este sentido, Mezquita destacó que, al tratarse de una orden aún en borrador, existen numerosas cuestiones que aún no tienen una respuesta cerrada y clara.
Según han explicado desde la Fampa, uno de los puntos centrales de la mesa ha sido el impacto de la nueva ley en la libertad de elección de la lengua vehicular por parte de las familias. "Los ponentes señalaron que, aunque la ley defiende esta libertad, la realidad de los centros educativos podría limitarla según las mayorías", afirman. Así, según destacó Francesc Mezquita, “sí que se garantizará una libertad de elección, pero esta elección probablemente en muchos casos no se podrá hacer efectiva por el tema de las mayorías (...) Es decir, si más del 51% de un centro elige una lengua, el resto del alumnado tendrá que adaptarse”.
Por su parte, Zulaika Agustí, representante de los docentes, destacó varias problemáticas asociadas a la nueva ley. En concreto, comentó que esta ley "parte de una base errónea". "No tiene en cuenta que claramente nos encontramos en una situación en la que el valenciano, en el ámbito de uso, está muy por debajo del castellano", dijo. También destacó que la normativa lo que debería hacer es "conseguir revertir la situación de este retroceso del uso social del valenciano y no todo lo contrario".
Agustí criticó que la norma fomenta una minoría aún más grande del valenciano en zonas castellanoparlantes. "Directamente se les prohibirá el uso del valenciano, ya que no podrán decidir, como sí que se hará en las zonas valencianoparlantes", asegura. También expresó su preocupación por la pérdida de competencia lingüística del profesorado, afirmando que “merma la calidad de la enseñanza en valenciano y desprotege aún más la lengua”.
Finalmente, Agustí alertó sobre la inviabilidad del programa Xarxa Llibres, indicando que “gestionar libros en diferentes lenguas cada año aumentará los costos para las familias y los centros”.
Por la parte de las familias, Pablo Sendra puso de manifiesto las dudas y preocupaciones de las familias sobre la nueva ley y expresó incertidumbres sobre cómo se aplicará a largo plazo, especialmente en cuanto a la distribución de recursos. Además de las dudas pedagógicas, Sendra también destacó problemas prácticos como el tema del banco de libros.
Violeta Tena, en representación del colectivo Famílies per Valencià, hizo una breve presentación del colectivo destacando la motivación de su creación. Según Tena, “el uso diario del valenciano ha bajado, pero el conocimiento, la capacidad de entender, de escribir y de leer en valenciano ha aumentado, y eso ha sido gracias a la escuela”.
Por su parte, Vicent Pitarch, filólogo y sociólogo valenciano, utilizó su turno de palabra para formular una defensa del valenciano, comentando cómo “el valenciano es una lengua atípica, única en el mundo, que mantiene una vitalidad cultural y científica impresionante”. Pitarch criticó la ley de libertad educativa por su "intención de excluir al valenciano de la educación y la sociedad, considerándola una barbaridad y un insulto a la identidad del pueblo valenciano".
Desde la Fampa Castelló-Penyagolosa han apuntado que, a pesar de las numerosas dudas que presenta tanto para las familias como para los docentes, el conseller de Educación, José Antonio Rovira, ha anunciado que la consulta telemática para la elección de la lengua vehicular tendrá lugar a finales de enero.
