La hostelería de Castellón tacha de "tomadura de pelo" las ayudas del Gobierno al sector

CASTELLÓ. La hostelería provincial ha manifestado este miércoles su total descontento con las medidas de apoyo implantadas por el Gobierno para ayudar a este sector, castigado por las restricciones para hacer frente a la pandemia. Desde la asociación Ashocas, que agrupa a buena parte de este sector, se confiesan "una vez más vapuleados" con unas medidas que califican de "tomadura de pelo.

Según informan desde este colectivo, el "macroplan anunciado a bombo y platillo por el Ejecutivo no ha contentado a nadie; así, de los 4.220 millones que se prevén, 2.268 millones están destinados al aplazamiento de impuestos, que no hacen, aún más si cabe, que condenar a muchos empresarios y trabajadores ya que es un dinero que más pronto o más tarde hay que devolver".

"Este plan no rescata a nadie", lamentan

Desde Ashocas consideran que este plan no rescata a nadie si no todo lo contrario: “No hay ninguna ayuda directa al sector de la hostelería, si lo hubieran anunciado el día 28 de diciembre hubiera tenido mucho más sentido ya que es una auténtica tomadura de pelo”, según señala su presidente, Álvaro Amores.

Con este tipo de medidas, explican desde esta organización lo único que se consigue es endeudar aún más a los empresarios del sector, que están facturando hasta un 70% menos y que siguen tributando igual que antes de la pandemia pero ingresando mucho menos.

Desde la patronal provincial consideran que las medidas deben ser más directas y contundentes con el fin de que contribuyan realmente a aliviar, de una manera clara, el sector que más perjudicado se ha visto por esta pandemia, como es la cancelación de la cuota de autónomos, tributar a razón de los ingresos que se están obteniendo, una rebaja en los impuestos de sociedades, exención de tributos municipales etcétera.

Desde Ashocas, en los próximos días plantearán movilizaciones para expresar el malestar del sector ante lo que consideran una falta de respeto a un gremio que genera miles de puestos de trabajo y que de seguir así, más de un 40% de empresas se va a ver obligada al cierre.

Pérdidas millonarias y de empleo por las restricciones del Consell

Por otro lado, desde Ashocas se ha señalado que las restricciones adoptadas por el Consell y que entraron en vigor este pasado lunes supondrá el cierre definitivo de muchos bares y restaurantes de la provincia, además de una destrucción de empleo sin precedentes.

Desde la asociación provincial de hosteleros de la provincia dicen sentirse muy preocupados, puesto que, tal como señala su presidente, Álvaro Amores, “estas medidas son un sinsentido y totalmente arbitrarias, que solo van a conseguir que muchas de las empresas hosteleras de la provincia se vean abocadas a no poder volver a levantar la persiana". En España, tal como detallan las mismas fuentes, "no hay una cultura europea de cenar antes de las 20 horas, por lo que mucha gente prefiere no salir para no tener que volver corriendo; si a eso se suma que las personas que trabajan en el comercio, en su mayoría, con horarios hasta la entrada la noche, eso hace que les sea imposible salir a cenar a nuestros establecimientos", explican desde Ashocas, que añade que la mayoría de bares y restaurantes se verá obligado a suprimir este turno porque no hay tiempo suficiente para mantener la clientela ni los negocios".

Finalmente, desde la patronal recuerdan que los bares y restaurantes de la provincia han hecho los deberes y han cumplido escrupulosamente toda la normativa sanitaria impuesta, y que el 90% de los brotes proviene del ámbito privado, donde no es posible ningún control. En cambio, en sus establecimientos, los clientes se ven sometidos a unos estrictos protocolos de prevención de contagio, e insisten que el Consell pretende buscar una cabeza de turco en su sector mientras en otros sectores que dependen de ellos tienen la situación totalmente descontrolada, sentencian desde Ashocas.