Foto: DANIEL GARCÍA-SALACASTELLÓ. El Ministerio de Hacienda reconoce "la difícil coyuntura por la que atraviesan" los cítricos. Así lo destacan fuentes del Ministerio de Agricultura a la hora de valorar la reducción de módulos para declarar el IRPF que, a propuesta de este último departamento, ha publicado este martes el Boletín Oficial del Estado. Con ello, los citricultores de la Comunitat Valenciana, que viven los últimos coletazos de una campaña desastrosa, ya tienen el instrumento para que, al menos, su actividad no tenga un cargo del Impuesto sobre la Renta por debajo del habitual.
De hecho, en la mayoría de los términos municipales productores de cítricos de la Comunitat Valenciana, Agricultura ha optado por aplicar una reducción de módulos mayor que la fijada para el conjunto del Estado español (donde pasa de 0,26 a 0,18 el índice para el cálculo del pago). A pesar de ello, desde las organizaciones agrarias critican la "disparidad" exhibida a la hora de calcular las reducciones, tal y como señalan la Unió de Llauradors y la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja).
Y es que, por ejemplo, en un mismo término municipal, el Ministerio establece dos índices de cálculo diferente para la naranja y las mandarinas (por ejemplo, en Alcàntera de Xúquer), mientras en poblaciones anexas, como Beneixida, Cárcer o Cotes, la reducción es mayor, del 0,05. Este es el índice más bajo que establece Hacienda para los cítricos en varios términos municipales de la provincia de Valencia, mientras en Castellón la reducción específica para diferentes localidades es bastante superior y solo llega hasta el 0,13.
Esto por lo que se refiere a los cítricos, porque la orden también recoge las reducciones de módulos para el resto de cultivos y para parte de la cabaña ganadera del territorio autonómico. Con ausencias destacadas, eso sí. Desde la Unió censuran el olvido de la uva de vinificación, "en especial para la comarca de Utiel-Requena, donde ningún término municipal tiene reducción a pesar de sufrir innumerables adversidades climatológicas"; así como la cereza en la mayoría de las localidades; las hortalizas; el arroz; "o los sectores más importantes de la ganadería valenciana, como son el avícola y el porcino", con la mayor parte de la explotaciones en régimen de integración "y que este año se vuelven a quedar sin reducción como también sucede con la cunicultura o el ovino-caprino y el bovino de carne".
A su vez, desde AVA-Asaja critican la omisión de las producciones de caqui o de frutales de verano de algunas poblaciones, mientras los agricultores de otros términos municipales sí podrán acogerse a las ventajas fiscales.
Asimismo, desde la Unió censuran que el Ministerio de Hacienda "no haya sido capaz de establecer ni siquiera un módulo cero para los productores de las comarcas alicantinas que han perdido su cultivo y producción" debido a la afección de la Xylella fastidiosa y tienen que tributar en base a un módulo de 0,05, el mismo "que el de algunas localidades de la Comunitat donde no está la bacteria".
Por todo ello, desde esta organización agraria exigen a Hacienda que rectifique la orden para recoger estas y otras propuestas. No en vano, su secretario general, Carles Peris, afirma que el Ministerio "parece publicar las localidades con reducción de módulos de una forma aleatoria y arbitraria, pues no se entiende cómo un pueblo tiene uno y el de al lado, con las mismas características y siniestros climatológicos, otro diferente".
Por su parte, el presidente de AVA-Asaja, Cristóbal Aguado, entiende a su vez que la diversidad de los cultivos de la Comunitat "no ha sido debidamente recogida en la orden" y "vuelven a repetirse algunos de los vicios y errores de otros años, lo que pone de manifiesto que sigue faltando mayor objetividad en los informes que realiza la Conselleria de Agricultura y que posteriormente traslada a Madrid para la confección de estas disposiciones".
