BURRIANA. Con motivo de las tradicionales comidas navideñas, la Policía Local de Burriana ya tiene programados más controles preventivos para contribuir a que estos próximos días los protagonistas sean los regalos y los reencuentros con familiares seres queridos y no los accidentes de tráfico con sus consecuencias negativas.
Durante los días previos a la Navidad son habituales las comidas y cenas de empresa, que se realizan en un ambiente festivo. Por este motivo, la Policía Local de Burriana apela a la responsabilidad de los conductores y las conductoras para que se organicen el transporte durante esas cenas y comidas o bien utilicen el transporte público con la finalidad de evitar accidentes y sanciones.
Desde la Policía Local se recuerda, además, que no solo los conductores de vehículos a motor y ciclomotores pueden ser objeto de control de alcohol/drogas, sino que estas normas también afectan a ciclistas y conductores de vehículos de movilidad personal (VMPs).
Por este motivo, se recomienda el uso del transporte público en sus distintas modalidades o bien la designación de un conductor, en los grupos de amigos que salgan a divertirse, para que se abstenga de consumir alcohol y así se garantice un regreso seguro, medida que no por antigua deja de ser efectiva.
Y es que la llegada de las fiestas y las celebraciones del mes de diciembre viene acompañada, como cada año en el calendario, de las campañas de prevención del consumo de alcohol y drogas en los conductores. De hecho, ha finalizado la campaña de control de alcohol y drogas al volante que organizó días atrás la Dirección General de Tráfico y a la que la Policía Local de Burriana se adhirió.
En esta campaña se han realizado un total de 249 pruebas de alcoholemia, resultando la gran mayoría de ellas negativas, a excepción de cinco que arrojaron resultados positivos al detectar en esos conductores una tasa de alcohol superior a la reglamentaria. En uno de los casos, uno de los conductores fue sometido a la prueba salival de detección de drogas en el organismo, resultando que dicho conductor había consumido derivados del cánnabis (THC).
Hay que reseñar al respecto que el consumo de alcohol se mide en la cantidad de alcohol en la sangre, mediante la verificación del aire espirado, sólo siendo sancionable el conductor que exceda de la tasa reglamentaria (0'25 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, o bien 0'15 miligramos en el caso de conductores noveles, durante los dos primeros años de conducción, o el caso de los conductores profesionales (servicio público, mercancías).
En el caso de las drogas, la mera presencia de las mismas en el organismo ya determina la imposición de una multa de 1.000 euros y la pérdida de 6 puntos del permiso de conducir. A ello hay que añadir que estos comportamientos pueden ser constitutivos de delito, si la intoxicación por alcohol o drogas influyera en la conducción, lo que podría dar lugar a una condena penal de consecuencias más graves.
