CASTELLÓ. La nueva categoría que ha instaurado la Federación Española de Fútbol para sustituir a la ya difunta Segunda División B, y en la que militan el Castellón y el Villarreal B, sigue sumida en la incertidumbre en aspectos claves de su funcionamiento.
Con solo tres semanas por delante para que se dé el pistoletazo de salida a esta competición, los 40 clubes que integran esta competición aún no conocen detalles sobre los ingresos que van a percibir por derechos de televisión, aspecto importante para la planificación presupuestaria.
Y es que el órgano rector del fútbol español aún no ha alcanzado un acuerdo con ninguna plataforma televisiva para la retransmisión de los partidos. Hace tres semanas abrió el plazo para la recepción de ofertas, pero no ha habido ninguna adjudicación tras su expiración, el 28 de julio.
La Federación puso a subasta los derechos con un precio inicial de 45 millones de euros por tres temporadas y pretendía optar por la mejor oferta, que debía igualar o superar este importe. De producirse un acuerdo por esta cantidad, cada club se llevaría alrededor de 300.000 euros por temporada y la Federación se quedaría con una porción de la tarta, según explicó el propio Luis Rubiales. Pero el plazo para presentar propuestas finalizó hace dos semanas y la RFEF no ha comunicado nada al respecto, por lo que los clubes siguen sin tener claro lo que van a percibir en este apartado.
Por otra parte, sigue sin cerrarse la inscripción de algunos de los participantes en la nueva categoría. Y es que la Federación informó recientemente de que hay cinco equipos que no han presentado toda la información requerida para participar en la Primera RFEF. Se trata de Calahorra, Rayo Majadahonda, Real Unión, Extremadura y Alcoyano. Este último está encuadrado en el grupo del Castellón y el Villarreal B y su presencia en la Liga aún no tiene luz verde, con el inicio de la competición a la vuelta de la esquina.
Esta semana está programada una reunión de la Federación Española con los clubes para determinar detalles sobre la competición. Pero a falta de solo tres semanas para el inicio de Liga, sigue habiendo interrogantes sobre su funcionamiento.