CASTELLÓ. La exigencia de rebajar la edad de jubilación ha llegado al sector petroquímico. El Sindicato de Trabajadores STR, mayoritario en el sector a nivel nacional, ha puesto en marcha una campaña a nivel nacional para pedir al Gobierno central que apruebe la aplicación del coeficiente reductor de la edad de jubilación a los sectores químico y de refino. Una medida que, según cálculos del mismo sindicato, afectaría a unos 2.000 empleados sólo en el polígono industrial castellonense de El Serrallo.
La organización sindical exige que se extienda el mencionado coeficiente reductor contemplado en la normativa estatal a las actividades de la industria petroquímica debido, según explica STR, al "desgaste que la tareas propias del sector tienen en la salud de los trabajadores, un factor que representa un incremento de riesgo para la seguridad a medida que un profesional envejece". Una medida que podría sacarse adelante en aplicación de legislación estatal de 2011, pero especialmente tras las últimas actualizaciones normativas aprobadas en 2015 y 2021.
La legislación permite al Ministerio de Inclusión y Seguridad Social aplicar este coeficiente reductor a trabajos "de naturaleza excepcionalmente penosa, tóxica, peligrosa o insalubre" y que "acusen elevados índices de morbilidad o mortalidad". Y el proceso previo para aplicar la reducción debe incluir estudios sobre siniestralidad en el sector, penosidad, peligrosidad y toxicidad de las condiciones del trabajo, su incidencia en los procesos de incapacidad laboral de los trabajadores y los requerimientos físicos o psíquicos exigidos para continuar con la actividad a partir de cierta edad.
El Sindicato de Trabajadores subraya que este avance de la edad de jubilación se ha dado ya en sectores como la minería o algunos cuerpos policiales y quiere extrapolarlo también al sector petroquímico, con incidencia en la provincia de Castellón en espacios como el polígono industrial de El Serrallo. Allí se encuentran, por ejemplo, la refinería de BP y la planta de UBE, también las compañías Masol, Nippon, Exolum y Repsol.
"Buena parte de los trabajos y tareas asociadas a las labores del sector de la química y del refino, suponen deterioro físico y psíquico de la salud laboral, que se incrementan con la edad, y por tanto un aumento de la posibilidad de siniestralidad", explican en el sindicato, por lo que, subrayan, existe la "toxicidad, penosidad y peligrosidad" que exige la normativa para aplicar el coeficiente reductor a este sector.
El secretario general del STR, Abel Tabuenca, manifestó que la campaña "ya está sumando adhesiones en el tejido institucional y político con el objetivo de poder presentar una propuesta en el Congreso de los Diputados este mismo año". En la misma línea, el secretario de organización, Toni Carmona, incidió en que los trabajadores suman cada vez mayor apoyo.
En ese sentido, el sindicato expone un estudio realizado desde la Universidad de Zaragoza, con el profesor David Moral-Martín al frente, según el cual el 65% de empleados encuestados del sector petroquímico aseguran que no podrán realizar "el mismo tipo de trabajo" a partir de los 60 años. El 87% cree que con la edad, aumentan las posibilidades de cometer errores en sus labores; el 81%, las posibilidades de accidente; el 88%, las de contraer una enfermedad derivada del trabajo.
La misma encuesta asegura que el 79% de los encuestados "conocen del suceso de un accidente de trabajo en su centro de trabajo en el último año" y el 56% cree que su empresa no reconoce como accidente de trabajo o enfermedad profesional toda la siniestralidad laboral ocurrida. El 97% ve "necesario" aplicar el coeficiente reductor a este sector.
La presentación de esta campaña del STR se produce pocas semanas antes de que se celebren las elecciones sindicales en la refinería de BP, unos comicios a los que STR concurrirá por primera vez. El responsable de la candidatura del Sindicato de Trabajadores, Israel Fernández, destacó que el sindicato está "en crecimiento exponencial en los últimos años" y aseguró tener "confianza" para entrar en el comité de BP. En este sentido, Fernández puso en valor "proyectos como el del coeficiente regulador para avanzar la jubilación en nuestro sector, porque nos permiten presentarnos ante los trabajadores como un sindicato innovador que trabaja para defender sus intereses con enfoques nuevos”.
