CASTELLÓ. Aunque era un secreto a voces, la conclusión de la liga regular en Segunda División B ya es un hecho. Lo es después de que la Federación Española de Fútbol (RFEF) haya comunicado este miércoles a las delegaciones territoriales la cancelación de las diez jornadas restantes debido a la crisis sanitaria del Covid-19. Esta medida confirma, a falta del recurso del Villarreal por el partido en Castalia, como campeón de grupo al Castellón, que llegó al parón en primera posición.
Asimismo, el organismo que preside Luis Rubiales ha informado a las direcciones autonómicas que prevé resolver las cuatro plazas de ascenso a través de un play off exprés con eliminatorias a partido único. Pero se trata de una declaración de intenciones cuya puesta en práctica no va a resultar fácil debido a los protocolos que hay que seguir para evitar los riesgos del coronavirus y al coste de los mismos. Además, las autoridades sanitarias tendrían siempre la última palabra.
Pese a ello, la Federación Española no renuncia a ese propósito, al menos de momento. Tal es así que ha proyectado un modelo similar para dilucidar los ascensos a Segunda División B, con la dificultad añadida de que implicaría nada menos que a 72 equipos pertenecientes a los 18 grupos que forman la Tercera División.
En caso de que no fuera posible la implantación de una promoción, la RFEF tendría que recurrir a un plan B que consiste en adjudicar los ascensos a los líderes de grupo. En Segunda División B el honor correspondería a Atlético Baleares, Logroñés, Cartagena y Castellón.
Por otra parte, el órgano rector del fútbol español ha suprimido los descensos a Tercera División, por lo que el curso próximo habrá 20 equipos más en la categoría de bronce, con la reestructuración que de ello se derivará.
Todas estas decisiones se comunicarán este jueves en la reunión de la junta directiva de la RFEF y se harán oficiales el viernes tras aprobación por parte de la comisión delegada.
Los anuncios realizados por el órgano rector del fútbol español llegan dos días después del establecimiento por parte del Consejo de Deportes (CSD) de una cobertura legal que faculta la toma de decisiones de las federaciones deportivas sobre el final de temporada.