VALÈNCIA (EP). La Unió de Llauradors ha pedido al ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación en funciones, Luis Planas, un "análisis real" del impacto del acuerdo UE-Mercosur en el campo; mientras que la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) ha reclamado considerar a los cítricos como "productos sensibles" y que se establezcan barreras arancelarias que equilibren el mercado.
Así se han expresado las distintas organizaciones en sendos comunicados. La Unió ha considerado "de vital importancia un análisis profundo, que ponga en la balanza no solo a los coches, las grandes compañías y los bancos, que pueden ser los grandes beneficiarios, sino también a las miles de explotaciones familiares que pueden verse negativamente afectadas".
Ante la próxima comparecencia de Planas en el Congreso, la organización ha recalcado los "riesgos" que puede entrañar el acuerdo comercial UE-Mercosur para las producciones valencianas y ha exigido al ministro en funciones que "profundice" en las consecuencias que puede tener este acuerdo "antes de posicionarse oficialmente en la ratificación".
En este contexto, ha puesto de ejemplo al Ejecutivo francés, que encargó a expertos independientes un estudio completo sobre el impacto que Mercosur puede tener para la producción gala. "Resulta sorprendente en este caso que nos tengamos que ver mejor representados los agricultores y ganaderos valencianos y españoles en el ámbito europeo por el Gobierno francés que por el nuestro", han criticado desde la Unió.
La organización agraria se ha mostrado "cautelosa" y ha pedido que el Gobierno y el Congreso "no se precipiten" a la hora de ratificar el acuerdo. "Se lleva negociando 20 años este tema. No tendría sentido haber esperado tanto si no se hubiese cambiado ninguno de los impedimentos más importantes para la firma", han advertido.
Por su parte, AVA-Asaja ha considerado "impropio" de un ministro de Agricultura realizar una "valoración triunfalista" sobre el acuerdo con Mercosur "cuando existen sectores productores europeos que van a verse afectados gravemente, como es el caso del citrícola, el arrocero y el apícola".
En este contexto, ha señalado que las importaciones de estos países a la UE superan con creces a las exportaciones de productos agroalimentarios europeos a Mercosur. Concretamente, en 2018 se importaron 377.350 toneladas de cítricos, mientras que se exportaron 27.700, en el caso del arroz se importaron 377.350 toneladas y se exportaron 5.199, ha detallado.
Además, ha criticado que las condiciones económicas de producción de estos países "no son comparables" a las europeas y ha considerado que el Gobierno "no está siendo honesto al afirmar que los intereses del sector agroalimentario de la UE han sido contemplados en la negociación", ya que "hasta hace poco se desconocían las condiciones del acuerdo".
AVA-Asaja ha reclamado "medidas arancelarias estrictas y que los cítricos sean declarados producto sensible". Además, los sectores productores como el arrocero y el apícola "también se verán perjudicados por este acuerdo y como compensación únicamente se prevén medidas de contingencia que son insuficientes".
El presidente de la organización, Cristóbal Aguado, ha asegurado que no están en contra del libre comercio, ya que ellos son exportadores, pero "el libre comercio no significa que todo vale y es necesario realizar un estudio de impacto". "El ocultismo con el que ha sido elaborado este acuerdo es sorprendente y al parecer con el beneplácito del Gobierno español", ha criticado.
"La valoración triunfalista de Planas debería haber sido muy matizada, ya que existen sectores sensibles que no se han tenido en cuenta. Tal vez esta valoración tan positiva tiene alguna explicación y es que fue el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, quien aceleró la firma de este tratado comercial, y no es de extrañar que se señalen únicamente los beneficios que tendrá a la hora de abrir puertas giratorias", ha denunciado Aguado.
En la misma línea, ha sostenido que quienes van a disfrutar de este tratado "son precisamente las grandes empresas e inversores españoles, que harán negocio mientras otros sectores productivos, los de siempre, se ven sumidos en la ruina más absoluta".