La caída en bolsa de Delta Airlines

MADRID. Esta semana Delta Air Lines anunció que invirtió 60 millones de dólares en Joby Aviation y podría aumentar hasta los 200 millones de dólares. Joby Aviation es una empresa emergente de taxis aéreos eléctricos que ofrece un servicio de casa a aeropuerto. Delta ha firmado un contrato "mutuamente exclusivo" con la start-up en Estados Unidos y Reino Unido por cinco años, con opción a prórroga. Las acciones cerraron la jornada con un descenso del 1,97%.

En una sesión informativa, el director ejecutivo de Joby, JoeBen Bevirt, mostró a los periodistas un ejemplo del servicio de su empresa a los clientes: un viaje de Manhattan al aeropuerto JFK, que puede durar hasta 50 minutos en un viaje por carretera a la antigua usanza, puede durar tan sólo 10 minutos con un avión de Joby para cinco pasajeros. Bevirt también ha dicho que el coste sería comparable al de un Uber.

Sin embargo, por muy emocionante que suene todo esto, no está claro cómo impulsará los beneficios de Delta. En primer lugar, la aerolínea no es la única que está trabajando en un servicio de taxi aéreo al aeropuerto. En segundo lugar, todavía existe una considerable burocracia regulatoria y se desconoce cuándo comenzará el servicio. Delta presenta sus resultados el jueves. Basándose en 11 analistas de Wall Street en Tipranks, el objetivo de precio medio para las acciones es de 45,15 dólares, una subida del 56,55%, en los próximos 12 meses. No creo que eso suceda, pero incluso si lo hace, creo que el precio de las acciones caerá al menos hasta los 25 dólares, si no vuelve a llegar a incluso 20 dólares, primero.

Las acciones completaron un segundo patrón de continuación de un gráfico de cabeza y hombros consecutivo. Un movimiento de retorno ha confirmado con éxito la integridad del segundo. El retroceso formó una bandera alcista, bajista tras la venta de cinco días consecutivos anterior. El patrón de continuación del gráfico de cabeza y hombros refleja un intento fallido de tocar fondo, y una bandera proyecta una venta continuada. El rango ascendente es un período de descanso después de que un torbellino sorprendiera a los vendedores en corto, que aumentaron la demanda cuando cubrieron estas posiciones cortas, lo que provocó la subida de la bandera. La oferta actual ahogó la demanda disponible empujándola por debajo de la bandera. Esa penetración señala a todos los que abandonaron sus posiciones cortas que la fiesta no ha terminado, atrayendo a nuevos vendedores en corto.

El objetivo del gráfico de cabeza y hombros se establece midiendo desde la cabeza de 35,79 dólares hasta el punto de repunte del patrón en 30,53 dólares, provocando un movimiento de 5,26 dólares, con el objetivo en 25,27 dólares. Hay dos interpretaciones de objetivos para la bandera: una conservadora, hasta su primer final de descenso, y otra liberal que incluye sus últimos mínimos.

Medida conservadora y liberal

La medida conservadora, desde los máximos del 20 de septiembre, 33,27 dólares, hasta mínimos del 26 de septiembre, 28,01 dólares, supone un movimiento de 5,26 dólares (irónicamente, precisamente el mismo que el gráfico de cabeza y hombros desde su punto de repunte de 29,40 dólares, estableciendo un objetivo de 24,14 dólares. Sin embargo, aunque el precio haya penetrado el fondo de la bandera, todavía podría volver a reconquistar sus máximos.

La medida liberal es un movimiento de 6,07 dólares desde los mismos máximos hasta los mínimos de 27,20 dólares del 3 de octubre, midiendo desde el mismo punto de repunte hasta 21,13 dólares.

Pinchas Cohen es analista de Investing.com