VALÈNCIA. (EP) La Cámara de Comercio de España ha recortado 1,2 puntos sus previsiones de crecimiento para la economía española en 2022, desde el 5,5% hasta el 4,3%, debido al impacto de la guerra en Ucrania y a la subida de los precios energéticos.
"La guerra en Ucrania ha cambiado de manera radical el panorama económico, hasta el punto de que restará 1,2 puntos porcentuales al crecimiento económico en 2022", ha señalado el organismo que preside José Luis Bonet a través de un comunicado.
Las razones de este menor crecimiento se explican, sobre todo, por la incidencia que la alta tasa de inflación tendrá sobre el consumo de los hogares y la inversión de las empresas. En concreto, la Cámara de España estima que la inflación media este año se situará en el 6,7%, con una tasa subyacente del 3,4%.
Esta fuerte subida de los precios mermará de manera significativa la capacidad de gasto de las familias. Según los últimos datos publicados por el INE, el 61% de las clases de productos y servicios que componen la cesta de la compra se encarecieron más de un 2% en febrero, y el 21% de estas partidas elevaron su precio por encima del 5%. Por esa razón, la Cámara de Comercio ha decidido también rebajar a la mitad la tasa de crecimiento del consumo privado, que pasa del 4% al 2%.
El aumento de los costes a los que deben hacer frente las empresas, y muy particularmente los energéticos, incidirá también en la inversión empresarial.
Por lo que se refiere a la inversión en bienes de equipo, la previsión se mantiene en el 10,6%, cuando en 2021 la formación bruta en bienes de equipo creció un 15,2%; en cuanto a la construcción, se han rebajado las previsiones, del 6,2% al 1,2%, ya que las expectativas de un cambio de signo en la política monetaria y la menor renta disponible de las familias anticipa una menor demanda de hipotecas.
Por lo que se refiere al sector exterior, la Cámara de Comercio ha anticipado que las exportaciones apenas se verán afectadas, ya que el comercio con Rusia y Ucrania es poco significativo --Rusia apenas representa el 0,8% de nuestras ventas en el exterior y Ucrania el 0,2%--. Sin embargo, el impacto será mayor en las importaciones en rúbricas como el petróleo, el gas y los cereales.
Esta situación económica más adversa se traducirá también en un crecimiento del empleo también inferior a lo esperado. La previsión de la Cámara de Comercio es que la ocupación aumente un 3,2% en lugar del 4,9% inicialmente estimado, lo que se traducirá en que la creación de unos 600.000 nuevos puestos de trabajo en 2022.
En cuanto a la incidencia que este nuevo panorama económico tendrá en las cuentas públicas, la Cámara de Comercio ha apuntado que las perspectivas están todavía por determinar, hasta conocer las medidas fiscales que el Gobierno pueda tomar para amortiguar la subida de los precios energéticos.
"De momento, el efecto de la inflación podría traducirse en una rebaja del déficit en términos nominales, aunque este aspecto será objeto de revisión en el futuro", ha asegurado la organización.