VALÈNCIA. La Generalitat Valenciana trabaja a contrarreloj para reabrir lo antes posibles la red de carreteras autonómicas en la provincia de Valencia. Las labores no son nada sencillas porque la Dana ha destruidos puentes, pasarelas y algunos tramos de vías, que deben de volver a levantarse desde cero. Sin embargo, ya ha habido grandes avances porque de las 18 carreteras que quedaron seriamente dañadas por el temporal, once ya están abiertas para facilitar la movilidad y descongestionar el tráfico.
"Esto es una situación inédita y una catástrofe de dimensiones nunca antes conocida", remarcó el conseller de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio, Vicente Martínez Mus, en una rueda de prensa para hacer balance sobre la afección de la Dana en infraestructuras valencianas y explicar el avance de la reconstrucción. "No hemos perdido ni un minuto. El objetivo de este departamento ha sido atender la emergencia y, en paralelo, la reconstrucción", enfatizó.
En este sentido, explicó que desde el mismo martes 29 de octubre por la noche, cuando ocurrió la tragedia, ya se visitaron algunos de los puentes más afectados y dos días después, es decir, el jueves se adjudicaron los primeros contratos de emergencia para que el viernes 1 de noviembre ya entrara la maquinaria y trabajara sobre el terreno.
En un principio, fueron 18 las carreteras que más sufrieron los estragos del temporal, pero, a lo largo de estos días, se han podido completar las obras de adecuación de 11 de ellas, como la CV-400 o la CV-407, "algo fundamental para recuperar la movilidad", enfatizó el conseller. Así, destacó "la concienciación y responsabilidad" de los valencianos a la hora de no utilizar su vehículo privado, como ha pedido la Administración, algo que está favoreciendo las labores de los profesionales de la construcción de las obras públicas.
Entre las conexiones que permanecen cerradas al tráfico se encuentran tramos de la CV-36; la CV-33, la CV-309; la CV-42, la CV-304, la CV-407 y la CV-50. "Tenemos en ejecución 12 contratos de emergencia para recuperar la conectividad con las zonas más afectadas, además de que estamos reforzando dos puentes y dos pasarelas, gravemente tocadas", detalló Martínez Mus.
Ahora se está en una segunda fase en localidades como Torrent que, por el momento, siguen incomunicadas porque la mayoría de sus accesos están inoperativos. Por eso, en puntos de la CV-33 se "agilizan al máximo los trabajos" porque un puente está muy tocado y otro, derrumbado. El titular del ramo reconoció que "es básica esta conectividad con la ciudad".
En cuanto a la red de metro, el servicio de tranvía de la red de Metrovalencia se reabrirá este sábado 9 de noviembre, dos días antes de lo previsto, con el objetivo de facilitar la movilidad de miles de ciudadanos en la ciudad de València. Concretamente, se pondrán en funcionamiento las líneas 4, 6, 8 y 10, desde la estación de Alacant. El resto de conexiones se restablecerán en siguientes fases, que aún tardarán “meses”.
El conseller admitió que gran parte de las vías y la infraestructura ha quedado muy dañada por los estragos del temporal, por lo que la puesta en funcionamiento del servicio se ha planteado en tres etapas. La primera de ellas se activará este sábado con la vuelta del tranvía, para en siguientes meses completar la red de Metrovalencia.
La segunda fase será reactivar las líneas 1, 2, 3, 5 y 7, que tienen daños menores, en el plazo de un mes. Ese es el objetivo que se ha fijado, aunque todo dependerá de la evolución de los trabajos. Y, por último, y sin fecha concreta dada la afección, la Conselleria restaurará las líneas 1, 2 y 7 en su conexión con el sur de Valencia, que son las localidades más afectadas por las inundaciones. "En estas zonas hay muchos daños en la infraestructura y no somos capaces de decir cuándo estarán acabados los trabajos”, reconoció Martínez Mus.
En cuanto al saneamiento, Martínez Mus explicó que de la red de 122 depuradoras y colectores de la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales de la Comunitat Valenciana (Epsar), 22 de ellas quedaron en una situación "crítica". No obstante, cerca de 400 operarios de la Generalitat y la Diputación de Valencia han estado sobre el terreno para salvar el servicio y, a fecha de jueves 7 de noviembre, el 80% de las depuradoras "ya funcionan perfectamente".
A nivel residuos, se ha puesto en marcha un plan de choque para el deposito de las miles de toneladas que cada día se retiran de las localidades afectadas por la riada. De hecho, al día se sacan 2.5000 toneladas de residuos de los cascos urbanos que se están depositando en campas habilitadas como depósitos temporales para, por la noche, trasladarlas a plantas de tratamientos.
Asimismo, y por si fuera necesario, Conselleria ha habilitado canteras por si el volumen de residuos obligara a precisar más espacio.