Como se esperaba, la tasa de inflación de la zona euro aumentó en noviembre. Pasó del 2% en octubre al 2,3% en noviembre. Hubo pocos cambios en los detalles. Los precios de los servicios cayeron ligeramente al 3,9% desde el 4% de octubre, pero no se espera una relajación real a corto plazo. No obstante, el índice subyacente se mantuvo sin cambios en el 2,7%. Los precios de los alimentos han bajado ligeramente y el descenso de los precios de la energía se ha ralentizado. Para diciembre, esperamos que la inflación general se mantenga muy por encima del 2%.
No obstante, la tendencia de la inflación es más favorable de lo previsto. En sus previsiones para el cuarto trimestre de 2024, el Banco Central Europeo esperaba una tasa del 2,6%, que probablemente se quede por debajo de nuestro 2,4% previsto. Sin embargo, el avance de la inflación no es tal como para esperar un movimiento de 50 puntos básicos en diciembre a pesar del deterioro de los indicadores de sentimiento. Seguimos esperando un recorte de 25 puntos básicos del tipo de depósito en diciembre.
Ulrike Kastens es economista para Europa de DWS