CASTELLÓ. El Pleno del Ayuntamiento de Vila-real aprobó este martes las dos últimas bonificaciones del 95% del IBI a los locales con negocios, en respuesta a las alegaciones presentadas por dos establecimientos, cerrando de esta manera un balance con más de 700.000 euros bonificados en dos años.
La medida de estímulo fiscal, acordada en el seno de la Mesa del Pacto local por el renacimiento de la que forman parte todos los grupos municipales y aplicada en 2022 por segundo ejercicio consecutivo, tiene como objetivo ayudar a la reactivación de sectores especialmente perjudicados por la pandemia.
En concreto, en 2022 se han atendido 365 peticiones por parte de titulares de negocios o propietarios de locales en los que se ubican actividades como escuelas infantiles, academias, hostelería, ocio, comercio minorista, transporte, servicios de cuidado personal y actividades deportivas. Más de 385.000 euros bonificados para favorecer la recuperación económica que se suman a los 335.000 euros del año pasado en un balance que supera los 700.000 euros en los dos últimos ejercicios.
“La gestión y los efectos de la pandemia, sumada al encarecimiento exponencial de la factura energética y a la inflación desbocada está poniendo en graves dificultades las finanzas del Ayuntamiento, situación que nos han llevado también a aprobar una relación de pagos en este último Pleno de 300.000 euros para hacer frente al sobrecoste energético y de las basuras sobrevenido a final de año. A pesar de todas estas dificultades, no dejamos de estar al lado de nuestras empresas y por eso hemos dejado de ingresar en estos dos años cerca de 700.000 euros en estas bonificaciones del IBI”, explica el concejal de Hacienda, Xus Madrigal. El grueso de los negocios bonificados corresponde a comercios minoristas y restauración.