CASTELLÓ. Varios centenares de personas, alrededor de 1.500 según la organización y 350 según las cuentas de la Policía Local, se han concentrado en la noche de este viernes en la plaza Santa Clara para solicitar al Ayuntamiento la adopción de medidas que garanticen la continuidad de las Tascas de Castelló.
La convocatoria, en la que la mayor parte de los participantes tan solo han tenido que desplazarse unos metros desde la propia zona gastronómica, se ha desarrollado en un ambiente reivindicativo en la que los organizadores han destacado la tradición de este espacio, surgido a raíz de que Ernesto Bou fundase en 1972 la tasca La Oficina, a la que le siguió El Mejillón en pocos meses y posteriormente el resto de establecimientos.
El recuerdo a Ernesto ha sido el momento más emotivo de la concentración, sobre todo para su hijo, al frente de dos de los locales y entre los organizadores de la cita. "Con esto queremos que el Ayuntamiento vea que el pueblo de Castelló valora las Tascas", ha señalado tras la cita. "En 12 años no hemos protestado, siempre se nos ha pedido comprensión... y más comprensión es cerrar", ha querido remarcar el empresario hostelero.
Con gritos de Salvem les Tasques y No somos zona ZAS, los asistentes han mostrado su apoyo a la zona gastronómica y de ocio. Precisamente, la problemática para dejar de ser Zona Acústicamente Saturada ha sido el asunto que ha centrado el parlamento de otro de los organizadores, José Romero, quien ha mostrado el proyecto que han elaborado los empresarios para dar una solución a los niveles de ruido.
"Siempre nos han dicho que si les llevábamos un proyecto acústico no tendrían ningún problema en aceptarlo, aquí está", ha apuntado al respecto. A la conclusión de la concentración, tanto él como Bou han solicitado al consistorio las mediciones de ruido, que según señalan en alusión a la actualización del régimen de medidas de la zona publicada en el Diari Oficial de la Generalitat del pasado 10 de enero, "tienen que ser continuas". Por eso, los empresarios solicitan que desde el equipo de gobierno acepten este proyecto "fiable y con garantías certificadas por ingenieros y técnicos acústicos", apunta Romero.
En la cita, celebrada dos días antes de las elecciones del 10N, se oyó algún tímido grito de Marco dimisión. Hasta la plaza se acercaron diferentes representantes municipales del Partido Popular, que momentos antes habían celebrado el acto de cierre de campaña tan solo a unos metros de distancia, en la plaza de la Pescadería.