Así lo explicaron los síndics de los tres grupos (Miguel Barrachina, del PP; José María Llanos, de Vox y José Muñoz, del PSPV), mientras que el portavoz de Compromís, Joan Baldoví, consideró que reprobar a Ribera es "insultar a los valencianos" pero defendió que eran "muy críticos" con la gestión de la ministra y por ello presentaron una enmienda de modificación a la propuesta del PP, aunque no ha salido adelante.
El síndic del PP señaló que Ribera "se ha significado por hacer un daño permanente a la Comunitat Valenciana", y le acusó de paralizar "60 proyectos que heredó del Partido Popular de protección de la costa". "Además del daño global se ha significado haciendo daño también a todas nuestras provincias", aseveró.
Desde Vox, José María Llanos consideró que "hay elementos más que suficientes" incluso para que Ribera "sea cesada y que no vuelva a entrar en política". "Es tan negligente que deja de ir la mitad de veces al Congreso de los Diputados cuando le corresponde y además la ministra de 'Transacción Ecológica' está perjudicando absolutamente todo nuestro sector climático, agricultura, ganadería, pesca y también nuestra industria", sostuvo.
Por su parte, el síndic del PSPV-PSOE en Les Corts, Jose Muñoz, acusó al PP de "abrazar la violencia verbal e institucional en forma de ataque personal contra la candidata socialista a las elecciones europeas": "No buscan argumentar políticamente solo destruir a una persona".
Y desde Compromís, que finalmente no ha apoyado la reprobación, la diputada Paula Espinosa remarcó: "Si les interesara l'Albufera, no querrían la ampliación del poder valenciano". "Consideramos que esta propuesta es electoralista a más no poder de cara a las elecciones europeas y esa no es manera de salvar l'Albufera".