VILA-REAL (EFE). El mítico exjugador argentino Juan Román Riquelme fue el centro de atención del Partido de las leyendas del Villarreal disputado en La Cerámica, siendo de largo el futbolista más ovacionado y reconocido a lo largo de todo el evento por la afición.
El Villarreal anunció a sus jugadores uno a uno para que fueran apareciendo en el terreno de juego, siendo aplaudidos todos ellos. Aunque destacaron futbolistas como Bruno Soriano, Marco Senna, Diego Forlán y Martín Palermo, la salida de Juan Román Riquelme al campo fue apoteósica. La mezcla entre aficionados del Villarreal y de Boca Juniors en las gradas desató la locura cuándo apareció el ocho argentino.
Durante el partido, Riquelme jugó 65 minutos, dejando detalles de calidad, con buenos pases e incluso pudo marcar con un disparo que salió junto a la base del poste. El jugador recibió el reconocimiento de la afición y pudo dirigirse a los que fueron sus aficionados al señalar que "estoy feliz de estar aquí, para mí siempre es una felicidad venir aquí, he disfrutado mucho en este club y en esta ciudad".