ALICANTE. A nivel mundial la incidencia por chinches de las camas (Cimex lectularius) es cada vez mayor, y España no es una excepción. Se pueden encontrar en hoteles, albergues, casas rurales, etcétera. Los seres humanos cada vez viajan más, lo que aumenta la probabilidad de dispersión de estas chinches. ¿Y si sentimos picores al llegar de uno de nuestros viajes? Lokímica enseña las claves para detectar la presencia de las chinches de la cama.
La presencia de las chinches se ha multiplicado durante los últimos 20 años, con la globalización mundial. Estos insectos se quedan adheridos a la ropa, a todo tipo de tejidos o a las maletas. Así, las personas transportan individuos y, con ello, contribuyen a que haya plagas de chinches en lugares donde antes no las había. Por otra parte, el azar también juega un papel crucial, ya que por casualidad pueden llegar chinches a un hogar completamente limpio.
Las chinches de las camas no transmiten ninguna enfermedad a las personas. No obstante, pueden provocar problemas en aquellos seres humanos que tengan algún tipo de reacción alérgica con su picadura, tal y como ocurre con otros insectos.
En todo caso, es fundamental contactar cuanto antes con una empresa de control de plagas como Lokímica. Los tratamientos especializados se deben realizar a la mayor brevedad posible. Estas actuaciones ayudan a evitar la proliferación de las chinches y permiten controlar la población de estos insectos. Esta especie se puede extender de manera veloz a lo largo de todas las habitaciones.
La actuación de las empresas de control de plagas es vital, ya que se trata de una plaga difícil de combatir. Como apuntan fuentes de Lokímica, una sola hembra embarazada puede generar toda una población de chinches. La mejor solución pasa por llamar a los expertos y confiar en el trabajo especializado.
Para detectar la presencia de las chinches, sigue los consejos de los profesionales. Se puede advertir su presencia a simple vista si se está atento, aunque recomiendan fijarse mucho, lo cual no es fácil. Lo habitual es que se mantengan ocultas durante el día en los puntos más recónditos de la casa. Entre sus escondrijos preferidos se encuentran los colchones, la cama, el interior de los armarios o el mobiliario.
Se debe tener en cuenta que las chinches salen a alimentarse preferentemente en horario nocturno. Detectan que la persona duerme mediante su temperatura corporal y los niveles de CO₂ que emite. En ese momento aprovechan para picar.
Las picaduras de las chinches pueden confundirse con las de los mosquitos, pero se deben tener en cuenta ciertos aspectos para identificarlas. Es importante analizar si se repiten en el tiempo y en la misma zona del cuerpo: por ejemplo, cuatro picaduras alineadas en alguna parte del cuerpo - pierna, espalda o vientre, por ejemplo- encajan con el patrón típico de las picaduras de las chinches. Los mosquitos pican y se van, las chinches pican repetidamente y dejan una marca rojiza.
Con toda esta información, y la ayuda de empresas especializadas de control de plagas como Lokímica, la persona tiene en su mano las herramientas para detectar la presencia de chinches y prevenir la proliferación de las poblaciones de estos insectos.
