Desayuno CP: Los ODS en la Comunitat Valenciana y cómo trasladarlos a las empresas
CASTELLÓ. Las empresas de la Comunitat Valenciana conocen los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) pero no avanzan todo lo rápido que deberían en su implantación y en algunos casos no saben cómo contribuir o cómo articular esa transformación social, que además ya no es una opción, sino que es la única respuesta que existe de cara al futuro.
Esa es una de las conclusiones del primer informe del LAB-ODS, impulsado por la Conselleria de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo, a través la Dirección General de Emprendimiento y Cooperativismo de la Conselleria de Economía Sostenible, para dar respuesta a la necesidad de profundizar y obtener datos para medir el grado de transformación social que existe en las empresas y en la Administración pública valencianas. En este laboratorio participan la Universitat de València, a través de la Cátedra de Cooperativas Agroalimentarias, la Universitat Jaume I de Castelló, expertos en la medida de la sostenibilidad, y las escuelas de Negocio y Empresa, ESIC y Florida Universitaria.
En torno a esa conclusión -los ODS no son ya una opción, sino que son la única respuesta posible para la supervivencia de las empresas- giró el desayuno de Castellón Plaza Los ODS en la Comunitat Valenciana y cómo trasladarlos a las empresas, organizado en la Cámara de Comercio de Castellón y en el que participaron Teresa García, directora general de Emprendimiento y Cooperativismo; José Vicente Soler, director general de Economía Sostenible; María Jesús Muñoz, catedrática de finanzas en la UJI y coordinadora del proyecto Horizonte Europa NoWaste; Blanca Marín, directora general del Aeropuerto de Castellón; Carolina Beguer, directora de Comunicación Corporartiva y Sosteniblidad de Grupo Gimeno; Santi Gimeno, chief corporate Sales Officer CCSO de Cuatroochenta; Pedro Hernández, gerente de la filial española Zschimmer & Schwarz; Ángel García, vicepresidente del Consejo Rector de Florida Centre de Formació, COOPV y coordinador de Florida Universitaria del Laboratorio ODS; Esther Pagán, profesora e investigadora de ESIC y José María Gómez, director general de PortCastelló.
Las empresas son más competitivas si asumen los ODS y los integran en su día a día. El tenerlos como referente genera mayor competitividad, ayuda a la retención del talento, se consigue mejor financiación, atrae a más inversores, además de reducir el impacto de la empresa en el medio ambiente y reducir la desigualdades. “Y muchas empresas ya están realizando acciones alineadas a los ODS y no lo saben. Hay que seguir informando a las empresas, sobre todo a las pymes, para que sepan qué pueden hacer en su ámbito de actuación, con acciones tangibles y medibles para que puedan aplicar el marco teórico que son los ODS”, apuntó Esther Pagán.
Por eso es necesario que las pymes conozcan y tengan acceso a herramientas para trabajar en el marco de los ODS y medir la sostenibilidad en las compañías. “La información y la formación son fundamentales y esas herramientas nos permiten entender el papel que estamos jugando y cómo podemos avanzar. En ese sentido las universidades tenemos que ver qué podemos hacer para ayudar a las empresas a acceder a ellas y que entiendan cómo puede aportarles valor”, destacó Ángel García.
También es importante el efecto tractor que pueden tener las empresas grandes. “Si una gran empresa establece políticas responsables es un agente cambio. Pero esa apuesta de ser una empresa sostenible debe hacerse por convicción, aunque está claro que si no lo haces a medio plazo estarás fuera del mercado, y trabajarlo de una manera transversal en todos los departamentos de la empresa. Es lo que estamos haciendo en Grupo Gimeno, donde hemos marcado una agenda muy definida”, afirmó Carolina Beguer.
De ahí que sea necesaria la colaboración, tal y como recalcaron todos los asistentes al desayuno de Castellón Plaza. Una colaboración que debe implicar a empresas grandes, pymes y autónomos, administraciones públicas y universidades, públicas y privadas. “Los retos del futuro solo podemos afrontarlos desde la colaboración y la cooperación, generando espacios de colaboración para que las pymes puedan avanzar más rápido. Las empresas grandes deben liderar el camino y la administración y las universidades ayudar a las pymes trasladando el conocimiento, acompañándolas y simplificando los procesos. Porque no podemos dejar a nadie atrás”, comento Teresa García.
En la misma línea se manifestó José Vicente Soler, quien remarcó el acercamiento entre todos los actores y puso en valor el papel jugado por la regulación en esta transformación, “hace diez años este debate no se producía y ahora vemos cómo la sostenibilidad es la herramienta para hacer frente a la crisis. Y en parte eso es gracias a la regulación existente, que estimula y contribuye a impulsar el cambio”.
Además, tal y como aseguró Blanca Marín, “las pymes tenemos más dificultades para trabajar de manera sistemática esas acciones, porque no tenemos recursos, de ahí que las políticas de fomento de la sostenibilidad de la Administración son positivas y las alianzas son fundamentales para avanzar y más en un contexto complicado como el actual”.
En este sentido, Mª Jesús Muñoz quiso hacer hincapié en la necesidad de generar estructuras y entornos donde las pymes puedan aprender y donde puedan acceder a la información que necesitan. “Ese es uno de los objetivos del proyecto Horizonte Europa NoWaste que va a coordinar la UJI para trabajar en sostenibilidad en todo el sistema agroalimentario, estudiar cómo podemos reducir el residuo en el sector para ser más circulares. En él participan 21 instituciones de siete países y hemos conseguido que todos los desarrollos sean open access porque esas innovaciones de los socios participantes deben llegar a todo el mundo”.
Eso sí, tal y como recalcó Santi Gimeno, es clave que esas políticas y ayudas de la administración para fomentar una innovación sostenible, estén vinculadas a que esa innovación se quede aquí. “Lo que no puede ser es que una empresa reciba una ayuda para desarrollar una innovación, pero luego la compre una firma extranjera y se lleve ese conocimiento. Así perdemos grandes oportunidades para el tejido empresarial y como sociedad”.
La Administración “tiene que ser acompañante y dinamizador, pero quién debe hacer el cambio es el empresario, le tiene que salir de dentro el compromiso con la sostenibiidad; en Alemania, donde está la sede de nuestra compañía, hay una concienciación absoluta y la sostenibilidad forma parte del ADN de las empresas... y ahí es donde queda mucho camino por recorrer en nuestro país”, apuntó Pedro Hernández.
Sin olvidar, tal y como recordó José María Gómez, que las empresas están formadas por personas “y cada uno debemos ser conscientes de lo que podemos aportar para que la empresa avance en el cumplimiento de los ODS, priorizar aquello donde puedes generar un cambio y así avanzar”.
