CASTELLÓ. La preocupante situación que el sector azulejero transita ahora mismo no la discute nadie. El hundimiento de la demanda de materiales cerámicos y la caída del volumen de las exportaciones dan buena cuenta de ello. Por eso, esbozar un futuro próximo con la gran cantidad de interrogantes que hay sobre la mesa es algo complicado. Sin embargo, las compañías portuarias que transportan estos productos parecen vislumbrar en el medio plazo un balón de óxigeno para el clúster de la cerámica.
En ese sentido, la segunda mitad del año es el plazo en el que los operadores del puerto de Castellón prevén una recuperación del tráfico marítimo de materiales azulejeros. Una proyección sujeta todavía con muchas pinzas pero que, junto a la notable acogida que está teniendo la feria del azulejo Cevisama estos días en Feria Valencia, dan una nota de optimismo entre la incertidumbre.
Así lo considera el presidente de la Autoridad Portuaria de Castellón, Rafa Simó, quien ha podido reunirse con las operadoras del recinto portuario que trabajan con materiales cerámicos. "Las sensaciones que tienen son relativamente buenas teniendo en cuenta que todos prevén una recuperación para la segunda mitad del año", asegura Simó, quien señala que era una proyección esperada pero cuya importancia reside en su consolidación.
"Aunque no es una buena noticia a corto plazo, sí que parece que esas previsiones empiezan a consolidarse y que la segunda mitad del año será relativamente mejor a la situación actual", explica el presidente de PortCastelló, qiuen sin embargo no negó las "muchas incertezas" que hay sobre la mesa. Entre ellas destacan, según dijo, "la bajada de la demanda del consumo global" y "la pérdida de mercados que ha tenido el sector español en favor de otros porque han estado más ayudados por las administraciones o porque tienen unos costes menores a los de aquí, lo que les permite ganar mercados que históricamente pertenecían a Castellón".
De esta manera, las compañías esperan una recuperación del ritmo comercial que, si bien es difícil que llegue rápidamente a las cifras registradas antes de la crisis, al menos pueda aproximarse progresivamente. Por el momento, los datos siguen siendo negativos sobre el movimiento de material cerámico en el recinto portuario, tal y como reconoció el propio Simó. Sin ir más lejos, el mes de febrero el puerto movió unas 300.000 toneladas de materiales de este sector, una cifra muy inferior a las 600.000 o 700.000 que, de media, se movían años anteriores cada mes.
"El momento del tráfico no es el mejor del mundo, estamos con datos por debajo del 30% respecto a principios del año pasado, que es verdad que fue el mejor inicio histórico del puerto", admitió el propio Simó, pero recalcó las previsiones de mejoría que han apuntado las empresas operadoras del sector en el recinto portuario. Y en ese sentido, las infraestructuras del propio puerto pueden jugar un papel esencial, que quiso destacar el presidente ante los asistentes de Cevisama.
Allí, junto al director general del puerto, José María Gómez, dio a conocer el estado de las infraestructuras productivas que mejorarán la conectividad del puerto de Castellón, como la conexión viaria entre dársenas, los accesos ferroviarios al puerto y la estación intermodal, que permitirán transportar por ferrocarril parte de la carga del sector cerámico que actualmente se distribuyen por camión.
En ese sentido, expusieron el proyecto Octopus que se desarrolla en la dársena sur y que supone casi 1 millón de metros cuadrados de suelo disponible para la instalación de nuevas empresas e industrias. Además, la consecución de nuevas conexiones marítimas es otro de los retos del puerto. En ese sentido, los representantes portuarios se manifestaron "conscientes que eso supondrá una mejora competitiva para el sector y mejorará las cifras de exportación".
Actualmente, dos terminales han apostado por invertir en el puerto de Castellón más de 36 millones de euros en infraestructuras: Noatum y Terminal Marítima del Grau. "Estas inversiones servirán para introducir mejoras en materia de protección ambiental, infraestructuras y medios mecánicos y de descarga de altas prestaciones para ganar en eficiencia y sostenibilidad", explicaron desde PortCastelló.
Hay que recordar que el puerto de Castellón se consolidó en 2022 en la novena posición en el sistema portuario español con su tercer mejor año histórico en tráfico total de mercancías, al mover casi 21 millones de toneladas de mercancías. De ellas, el 37% son de tráfico cerámico, que en 2022 supuso 7.722.401 toneladas. De ellas,6.540.700 fueron de importación (principalmente feldespato, arcillas y caolín) y el resto, un total de 1.181.701 toneladas de exportación (principalmente azulejos, caolín y frita de vidrio)
En Cevisama, Simó destacó también que el puerto ha aprobado en 2022 coeficientes correctores y bonificaciones por valor de 2,8 millones de euros para impulsar la competitividad de sus clientes. De ellos, afectaron al sector cerámico 655.544 euros, un 22,4% más respecto del año anterior. Concretamente, se duplicó la bonificación al embarque de azulejos, frita de vidrio, pigmentos y esmaltes, y pasó del 20 al 40%.