CASTELLÓ. (EFE). La Sociedad Valenciana de Pediatría (SVP) ha advertido de que el 50 por ciento de los adolescentes valencianos de entre 11 y 18 años no desayuna, y comenzar el día sin los nutrientes necesarios reduce el rendimiento escolar e incrementa el riesgo de sufrir sobrepeso u obesidad.
Así lo afirma SPV en una revisión que ha realizado a raíz de datos publicados por el estudio 'La adolescencia en España: salud, bienestar, familia, vida académica y social' elaborado por el Ministerio de Sanidad y en el que han participado unos 2.500 escolares de la Comunitat Valenciana. "El desayuno es una de las comidas más importantes del día porque aporta los nutrientes necesarios para las actividades matutinas, y saltárselo perjudica la capacidad de atención, reduce el rendimiento escolar y potencia los desequilibrios alimenticios", explica Luis Carlos Blesa, presidente de la Sociedad Valenciana de Pediatría.
De hecho, el desayuno debe cubrir entre el 20 y 30 % de las necesidades nutritivas que se adquieren a lo largo del día, ser variado y en consonancia y equilibrio con el resto de las comidas diarias, y, a ser posible, ingerido sin prisa, según las recomendaciones de los pediatras. Además, destaca que no desayunar es uno de los factores que incrementa el riesgo de padecer sobrepeso y obesidad ya que, al retrasar la ingesta de comida hasta horas más tarde, se favorecen los comportamientos ansiosos y los malos hábitos alimenticios.
En concreto, el 17 por ciento de los adolescentes de la Comunitat Valenciana tiene sobrepeso u obesidad, según los resultados de este estudio, señala la SVP en un comunicado. Según Blesa, "es fundamental que, como en todo el periodo infantil, pero especialmente en esta etapa de la vida, los adolescentes adquieran unas pautas saludables en alimentación y actividad física, para un adecuado desarrollo físico e intelectual".
Esto, añade el pediatra, "reducirá las posibilidades de padecer diversas enfermedades, como la diabetes u otras patologías cardiovasculares, entre otras".
Los pediatras también señalan que solo el 30 % de los menores de entre 11 y 18 años realiza alguna actividad física al menos cuatro días a la semana fuera del horario lectivo, y que solo uno de cada tres come fruta a diario,a pesar de que el 14 % consume dulces o el 21 % refrescos cada día.
"La ingesta de alimentos como bollería industrial, pastelería, chocolates y otros productos manufacturados (embutidos, salsas o precocinados) se debe eliminar o, por lo menos, consumir de forma muy esporádica, ya que en general contienen elevadas cantidades de grasas insanas, azúcares, colesterol y sal", detalla el presidente de la SVP. El estudio también señala que el 40 % de los menores de estas edades de Valencia, Alicante y Castellón considera que tienen una "salud excelente", sin embargo, el 6 % declaró haberse sentido solo en algún momento y el 10 %, triste.
En lo que respecta al ámbito familiar, educativo y de relaciones sociales, la mayoría de los adolescentes valencianos dice sentirse "satisfecho" tanto con su núcleo familiar como con los profesores, compañeros de clase y sus amistades.
Asimismo, el 28 % asegura que les gusta "mucho" la escuela, aunque hay un porcentaje similar, del 26 %, que se agobia mucho por las tareas escolares. "Tanto padres y madres, pediatras, profesores, como la Administración debemos trabajar de forma conjunta y global para conseguir un entorno adecuado para el crecimiento y desarrollo de los adolescentes, en el que puedan potenciar todas sus capacidades de forma segura y reduciendo, en la medida de los posible, ciertos riesgos y perjuicios", concluye el doctor Blesa.
Según fuentes de la SVP, estos datos se engloban en el informe global Health Behaviour in School-aged Children (HBSC), un proyecto auspiciado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), cuyo objetivo es conocer los estilos de vida y la salud de los adolescentes escolarizados.