Imagen de la rueda de prensa de la convocatoria de los paros.CASTELLÓN. CCOO, sindicato mayoritario en Correos, junto a las organizaciones sindicales UGT, CSIF y Sindicato Libre, con las que suma casi el 90% de la representación en la compañía, llevará a cabo en la primera quincena de noviembre concentraciones en las subdelegaciones del Gobierno de todas las capitales autónomas, en el marco de un calendario de movilizaciones que intensificará en noviembre con una huelga general el día 30 y otras dos el 21 y el 26 de diciembre. Asimismo, las organizaciones sindicales ya han advertido de que las movilizaciones continuarán en el 2019 si no hay un cambio de postura de la empresa.
La primera concentración se celebrará el próximo 13 de noviembre en la Subdelegación del Gobierno de Valencia y a ella está llamada toda la plantilla de Correos de Castellón y el resto de trabajadores/as de la Comunitat, con paros de cobertura de tres horas en todos los turnos.
Desde CCOO destacan que el calendario creciente de movilización y su prolongación en el 2019 es una medida necesaria ante los recortes del Gobierno anterior y la continuidad en la falta de políticas postales del Ejecutivo actual, que en su etapa en la oposición mostró su apoyo a las propuestas presentadas por las organizaciones sindicales y a los trabajadores y trabajadoras con tres proposiciones no de ley en la anterior legislatura. “Hasta que no se pase de los gestos y las palabras a los hechos, la movilización en Correos continuará vigente. Son el Gobierno, sus ministerios y la propia Dirección de Correos los que tienen en su mano desactivar uno de los mayores conflictos en la empresa postal pública de los últimos años”, señala la secretaria de CCOO Correos-Castellón, Fina Bernuz.
El sindicato ha indicado que las iniciativas deben llegar a la mayor brevedad al operador postal público porque la situación de déficit presupuestario de 230 millones de euros, el recorte en la financiación pública de 180 millones y la completa ausencia de un plan de diversificación, plantean un panorama "muy negro". Todo ello, con una plantilla reducida en 15.000 puestos fijos en la última década, 150 en la provincia de Castellón, la creciente precariedad laboral (con un 35% de eventualidad y el 22% de tiempos parciales en todo el Estado), con la tasa más elevada de todo el sector público, una regulación laboral sin actualizar y el recorte, congelación salarial y desregulación de las condiciones laborales.
Por estos motivos, CCOO ha apremiado al Ejecutivo a que no demore las decisiones porque la ciudadanía no puede seguir sufriendo el deterioro del servicio postal público producido por la estrangulación presupuestaria y la falta de plantilla, cuya evidencia más notable en esta provincia es la supresión de 150 puestos fijos, un 35% de empleo eventual, 22% de tiempo parcial (por días y horas), insuficiente para ofrecer un Servicio Postal Público de calidad.
CCOO y el resto de organizaciones sindicales han planteado sus exigencias al Ejecutivo, que pasan porque a Correos se le dote de un plan de prestación que garantice el servicio público de calidad a toda la ciudadanía independientemente de su lugar de residencia y pendiente desde hace siete años; un plan de diversificación para la obtención de más ingresos; y la irrenunciable actualización de la regulación laboral que inexorablemente debe recoger un incremento salarial, un plan de empleo plurianual de al menos 13.000 puestos fijos, así como fomentar la regulación de las condiciones laborales de los casi 60.000 trabajadores de Correos.
