CASTELLÓ. (EFE). Las comarcas de la Mariana Alta (Alicante) y el Alto Palancia (Castellón), donde se han producido los incendios de la Vall d'Ebo y Bejís, respectivamente, contarán con planes extraordinarios que permitan la recuperación económica y social de estos territorios, una vez superada la tragedia. Así lo ha asegurado este viernes el president de la Generalitat, Ximo Puig, tras reunirse con los agentes sociales, y ha explicado que se trata de algo similar a lo que se hizo con el Plan Vega Renhace, tras la DANA que azotó la Vega Baja, en Alicante.
El objetivo es hacer un plan integral para intentar superar la situación provocada por estos devastadores incendios, que en el caso de Bejís sigue avanzando sin control y ha arrasado ya 19.000 hectáreas, y servir de oportunidad de crecimiento y futuro. Estos planes, que se aprobarían en un pleno del Consell extraordinario, irán más allá de la recuperación medioambiental de la zona y se sumarán a otras medida más inmediatas, como los planes de ayudas directas a los afectados por el fuego o la reclamación de ayudas al Estado.
"Lo que deben saber los ciudadanos de esas comarcas es que la Comunitat Valenciana no los va a dejar solos, vamos a estar con ellos y a hacer todo lo posible por recuperar lo que significa esa pérdida enorme de riqueza natural y también recuperar anímica, social y económicamente las comarcas afectadas". Sobre el incendio declarado esta madrugada en Olocau a causa de un rayo, el president ha dicho que las últimas noticias son que hay "una cierta estabilización", lo que hace tener un "moderado optimismo", pues la extinción de un fuego depende, en gran medida, de la meteorología y habrá que ver cómo evoluciona.
Por contra, ha señalado que el incendio de Bejís sigue "muy activo", especialmente en la parte de entrada a la Sierra Calderona, a pesar de que hay en torno a 40 medios aéreos trabajando en su extinción.
Por otra parte, ha rechazado calificar ninguna actuación ni discutir el incidente del tren que circuló por la zona del incendio de Bejís, lo que causó varios heridos por quemaduras, algunos graves, porque en estos momentos "nuestra obsesión -ha dicho- es acabar con el fuego". Tras mostrar "el apoyo absoluto" a quienes están dirigiendo la extinción del fuego, ha recordado que hay abierta una investigación y que la cuestión está judicializada, y ha señalado aunque hay diferentes versiones de los hechos, no va a participar en el debate, pues no le corresponde.
Puig ha insistido que la gran prioridad es acabar con los incendios, especialmente con el de Bejís, que es "probablemente uno de los más graves de la historia reciente de la Comunitat Valenciana", y preocuparse por las personas heridas. En este sentido, ha vuelto a agradecer el "esfuerzo enorme de todos los trabajadores que en están haciendo un sobreesfuerzo" para extinguir el fuego y garantizar la seguridad, que es lo que, según ha dicho, más les preocupa.