'Mala gente', relato de los crímenes más míticos de España

VALÈNCIA (EFE). ¿Qué lleva a la gente a matar? Es una pregunta tan antigua como el propio crimen: algunos defienden que hay tantos motivos como asesinos, pero los periodistas Pere Cullell y Enrique Figueredo tienen claro que todos tienen en común que han sido cometidos por lo que el ciudadano de a pie llama 'mala gente'. Así han titulado su nuevo libro, 'Mala gente' (Destino, en castellano) o 'Mala gent' (Columna, en catalán), que realiza un viaje a casos icónicos de la historia negra de España, tales como el del Vaquilla, convertido en un mito de la delincuencia juvenil, o el asesinato de Carmen Broto, la prostituta que cautivó a la alta sociedad barcelonesa.

Se trata de la selección de las doce mejores historias que han contado en el pódcast que dirigen para La Vanguardia, 'Dossier Negro', en las que han podido contar con testimonios tan exclusivos como el del mismo Dioni, el exvigilante jurado que robó una furgoneta blindada con 320 millones de pesetas en 1989, para el caso con su punto de vista actualizado. "Hacemos lo que sabemos hacer, que es contar historias de malos", explica Pere Cullell. Ambos periodistas llevan trabajando juntos desde que se cruzaron en la sección 'Crònica Negra' del programa radiofónico 'El Món a RAC1', en 2012.

"Quizás el mayor desafío a la hora de escribir 'Mala gente' ha sido conseguir nuevas fuentes, material un poco diferenciado", revela Figueredo. Sin embargo, a pesar de que todos los casos son conocidos, ellos quieren "aportar una novedad, una ampliación de lo conocido". Los asesinatos que relatan Figueredo y Cullell abarcan desde 1928, cuando Josep Marimón mató a 10 vecinos en lo que se ha convertido en el mayor asesinato en serie de la historia española, hasta 2016, cuando María Jesús Moreno, más conocida como 'Maje', asesinó a su marido con ayuda de su amante en Valencia. A pesar de que han pasado casi 100 años de los asesinatos que cometió Josep Marimón, pudieron "contactar con el nieto de una de las víctimas que todavía llevaba dentro la historia", quien se la contó "como si fuera en presente".

En el capítulo sobre Asunta Basterra, la niña de doce años que fue asesinada por sus padres en 2013 en Galicia, cuentan con el testimonio de la compañera de celda de la madre, Rosario Porto, que se suicidó en 2020. Además, Figueredo asegura: "En algunos casos, el paso del tiempo ha permitido también que el asunto repose y, al coger un poco de distancia, nos ha permitido descubrir y darle matices que por la premura quizás no entendimos nosotros, ni la sociedad en general". Para Cullell y Figueredo no existe un patrón común en los crímenes, más allá de la separación entre "buenos y malos". "Nosotros buscamos precisamente lo contrario, los matices y las peculiaridades de cada caso", según Cullell.

Lo que sí que tienen claro es por qué a tanta gente le gusta saber de crímenes. "La razón de esta inclinación por las historias criminales es que son puro reflejo de la realidad", afirman en el prólogo del libro. "A veces los protagonistas de cada uno de estos sucesos son arquetipos de gente que podrían ser tus vecinos, tu peluquera o el barbero de tu barrio ", expone Figueredo. "En determinadas condiciones puede haber un desencadenante que haga que una persona, por muy común que sea, pueda cometer un crimen", concluye. En "Mala gente" el lector sin duda podrá satisfacer su curiosidad de saber todo lo que hay detrás de cada crimen. Desde la reconstrucción del suceso hasta la trama policial que derivó en la detención del asesino.