Conversamos sobre prioridades, urgencias y retos de futuro con la nueva directora adjunta de Audiovisual y Cinematografía del Institut Valencià de Cultura
VALÈNCIA. Maria Fuster acaba de aterrizar en la Dirección Adjunta de Audiovisuales y Cinematografía del Institut Valencià de Cultura (IVC). Fue la gran sorpresa de la convocatoria abierta que eligió al segundo escalón del ente, ya que el público bien le conoce por estar delante de las cámaras en À Punt.
El reto de Fuster no es baladí. Por una parte, tiene de gestionar las políticas públicas de uno de los sectores culturales que más economía mueve en la Comunitat Valenciana, estratégico en los últimos años por el aumento exponencial de los rodajes. Por otro, tiene que resolver algunos asuntos enquistados, como la falta de personal en el organismo, y problemas nuevos, como la relación con la Acadèmia Valenciana de l’Audiovisual.
Fuster, que hizo público su proyecto hace algunas semanas, se sienta con Castellón Plaza para hablar de su primera radiografía al sector y sus planes de futuro.
- Probablemente nuestros lectores te ubiquen por tu trabajo como presentadora, así que la primera pregunta es casi obligada: ¿Por qué se decidió a optar para dirigir el área de Audiovisual y Cinematografía del IVC?
- Para mí fue un reto súper emocionante. Venía de un periodo largo sin trabajo y lo vi una oportunidad bestial. Es un poco volver a mis orígenes. Yo estudié Comunicación Audiovisual y luego hice un Máster en Postproducción Digital y empecé por el mundo del cine. Es verdad que en lo que más he trabajado recientemente ha sido como presentadora de televisión (y es algo que he disfrutado muchísimo), pero últimamente me sentía un poco estancada y necesitaba aire fresco y experimentar con otras facetas en el mundo audiovisual. Es un reto brutal, que afronto con mucho respeto y responsabilidad, pero con ganas.
- Esta semana se ha elegido al nuevo director general del Institut, Álvaro López-Jamar. ¿Ya ha tenido posibilidad de reunirse con él? ¿Se han presentado mútuamente los proyectos?
- Sí, nos reunimos ayer precisamente [La entrevista se realizó el jueves 25 de abril], osea que él también acaba de aterrizar. Hemos intercambiado posiciones y mi impresión es muy buena. Creo que es un hombre fantástico, con el que podremos dialogas y buscar soluciones para asuntos que hay pendientes. Hay mucho trabajo por hacer, pero también necesita un margen de maniobra para acondicionarse.
- Ha utilizado la palabra aterrizar. Precisamente por eso le pido una fotografía de estos primeros días en la casa. ¿Con qué se ha encontrado?
- El símil del aterrizaje es porque es llegar de repente a una estructura y una maquinaria que ya está hecha, y tienes que adaptarte al ritmo de la administración pública. Yo, que vengo más de trabajar con productoras privadas y que soy muy resolutiva, lo primero que me estoy encontrando son unos tiempo muy lentos y ortopédicos para hacer cualquier cosa. Luego, también me encuentro con una precariedad en el personal considerable, y, en este sentido, hay mucho trabajo por hacer.
- Precisamente, los medios de comunicación señalamos que esa maquinaría que es el personal, necesita una actuación profunda.
- Esto tendremos que consensuarlo con el director general, pero hay muchos problemas de personal que parece que son endémicos; situaciones que parece que se han enquistado con el tiempo y que no se han solucionado. Por ejemplo, el Archivo, que es uno de los grandes abandonados en este sentido. Hay muchísimas carencias y es un tesoro que tenemos. Muchas veces no valoramos realmente el inmenso patrimonio audiovisual que tenemos ahí. Hay muchos problemas que se han arrastrado y parece que nos hemos acostumbrado a funcionar así. El mecanismo es complicado, pero tenemos que trabajar por cubrir todas las plazas que hacen falta.
- El conseller de Cultura, Vicente Barrera, ha explicitado que las programaciones no deben estar politizadas. Algo que, según él, pasaba con los anteriores directores adjuntos. En su proyecto subraya un “imperativo evidente” el de “despolitizar la cultura”. ¿En qué se produce eso en la programación?
- Esto se traduce en que en las programaciones y en la labor que vamos a desempeñar, sencillamente, vamos a tomar decisiones con criterios estrictamente técnicos y profesionales, donde la calidad esté por encima de cualquier otro tipo de factor y no sirva de reproches políticos ni de un lado ni de otro.
- El conseller señalaba las anteriores direcciones adjuntas, no sé si comparte el diagnóstico y qué cambios va a haber entonces.
- Yo no soy política y le deberás consultar al conseller eso. Insisto en que nuestros criterios serán técnicos, yo he venido aquí por el fomento y el cuidado de nuestro audiovisual. Y para eso hay que poner la calidad por encima de todo.
- En los últimos meses se ha puesto sobre la mesa una posible fusión entre Cinema Jove y La Mostra de València. En su proyecto habla de “unir esfuerzos” y el propio concejal de Cultura de València, José Luis Moreno, ha declarado que ha habido alguna reunión enfocada a una posible fusión. ¿En qué beneficiaría esta unión? ¿Cree que deben mantenerse las dos marcas o generar una común?
- Esto es un proyecto que lleva planteándose desde hace mucho tiempo: la idea de que haya un festival de envergadura y un prestigio sólido, que identifique la marca de València, como pasa (por ejemplo) con Málaga. Hay mucho trabajo por hacer y mucho tiempo hasta que un proyecto se pueda materializar y consolidar como referencia, pero creo que aquí tenemos talento de sobra. Aunar esfuerzos, fusionar manteniendo la personalidad de los dos festivales, es un proyecto soñado. Estoy en contacto con José Luis Moreno, lo hemos hablado, estamos estudiando la posibilidad, pero todavía sigue siendo una idea romántica.
- Desde la Conselleria de Cultura se ha propuesta una agrupación de los premios que apoyaba cada dirección adjunta en una única “Gala de las Artes Valencianas” ¿Cuál va a ser el papel del audiovisual en ella?
- En este momento, la Gala de las Artes Valenciana es un proyecto que fue una declaración de intenciones, pero todavía no hemos decidido nada. Es un tema muy importante, que tengo que hablar con el Director General, y buscar soluciones. En mi caso, estoy manteniendo una muy buena relación con Teresa Cebrián [presidenta de la Acadèmia Valenciana del Audiovisual, que organiza los Premios Berlanga], pero todo está por especificar y no puedo entrar en detalles.
- En su proyecto los premios tenían un protagonismo destacado. No me puede decir lo que va a pasar, pero, ¿qué le gustaría que pasara?
- Insisto en que tengo una buena relación con la Acadèmia y vamos a intentar llegar a un consenso y buscar la mejor solución posible.
- Por ahora, la dirección adjunta no ha tenido un papel muy activo en la puesta en marcha de nuevo de la Ciudad de La Luz. ¿Cuál es la ambición para el espacio y qué papel debe tener el IVC en este?
- En este mes escaso desde que me he incorporado, he intentado conocer a todo el sector, y una de las cosas que he hecho es ir ya dos veces a la Ciudad de la Luz. Estoy en contacto con Fermín Crespo [director de la Sociedad Proyectos para la Transformación Digital], y hemos coincidido en nuestra intención por la internacionalización, en la que tenemos que ir todos a una: Cultura, Industria, Innovación, Turismo. En este caso, a Ciudad de la Luz hay que darle un empujón. El diálogo es constante.
- Otro proyecto que implicaría otros departamentos es el clúster audiovisual. ¿En qué punto está?
- Mi filosofía es el de aglutinar a todos los agentes implicados. Aquí tenemos un montón de asociaciones y falta un poco de hoja de ruta en común. Y, en mi caso, mi función es escuchar al sector (que merece ser escuchado), intentar unificar necesidades y, como representante del IVC, hacer todo lo que esté en mis manos para atenderles.
- Precisamente en su proyecto hablar de esa “falta de hoja de ruta clara y común entre el sector”, además de la “fragmentación y división excesiva entre instituciones que dificulta el proceso de creación y financiación de los proyectos”. Estas conclusiones coinciden con la radiografía que hizo una de las tres asociaciones de productora, PAV. ¿Se ha reunido con el resto? ¿Comparten el análisis?
- Sí. Hay matices de cada una de ellas, pero creo que tenemos que incidir, no en las diferencia, sino en lo que nos une. Creo que, en lo realmente importante, vamos en la misma línea, que es la promoción y defensa de nuestro audiovisual.
- La situación operativa más sangrante en la dirección adjunta es la del Archivo de la Filmoteca. ¿Le ha podido transmitir a la Conselleria la urgencia de que la situación se resuelva ya? ¿Va a ser una prioridad?
- Sí, va a ser una prioridad. Para mí es fundamental reforzar el archivo. Yo sabía de la situación antes de incorporarme, pero es muy fácil verlo con esa perspectiva. Hasta que no tocas el terreno no sabes la magnitud de la tragedia. Y, en este sentido, me parece que el trabajo que hacen desde aquí es inmenso. Y muchas veces pasa, y precisamente esa es la frustración, que la gente no es consciente de ello porque no sabe que existe y no pueden valorar el inmenso poder del patrimonio audiovisual que tenemos aquí. Mi función es darlo a conocer y acercarlo, y el tema de la precariedad laboral para mí es una urgencia y tenemos que cubrirlas cuanto antes.
- Otra situación delicada es la de las ayudas. De ellas dependen proyectos de rodajes enteros. ¿Se mantendrán las bases este año para aligerar los plazos?
- La bases van a estar tal cual para que puedan salir bien este año. No vamos a cambiar ni una coma. De cara al año que viene, nos gustaría modificarlas para facilitar un poco el trámite y quitarle ese componente tan laberíntico que tiene y agilizar la burocracia; hacerlos menos farragoso en todos los sentidos. Ese es mi objetivo, y a ver si conseguimos mecanizarlo de tal manera que puedan salir en el primer trimestre del año.
- En su proyecto incide también en la descentralización. Por ejemplo, plantea que haya una Filmo d’Estiu también en Alicante y Castelló...
- Mi intención es precisamente esa, que Alicante y Castelló son tan importantes como València. El Auditorio de Peñíscola, por ejemplo, es una pasada. Mi intención es expandir la Filmoteca y llegar a todos los puntos.
- Una pregunta habitual que hacemos a los nuevos gestores es una recomendación de un libro, una película o un disco a nuestros lectores.
- Por ejemplo, estamos súper orgullosos de Las novias del Sur, de Elena López Riera con Suica Films, y su selección en Cannes, aunque aún no he tenido oportunidad de verlo. La última película que he visto y me ha gustado es Disco, Ibiza, Locomía, de Kike Maíllo. Es muy fresca. Y por decirte otra, el otro día recuperé una película que me marcó bastante cuando estudiaba, Harold y Maude. Y un libro… diría Invasió subtil, de Pere Calders.