Maroto saca pecho con las ayudas a la cerámica y elude aclarar las dudas con el borrador

CASTELLÓ. La situación crítica que vive el sector cerámico vuelve a colarse por unos minutos en el pleno del Senado. Lo ha hecho este martes a cuenta de una pregunta del senador de Compromís, Carles Mulet, al Ejecutivo en la que ha acusado al Gobierno de no atender las reclamaciones del sector. Mulet ha afeado al Gobierno que el borrador de las ayudas a los sectores gasintensivos no responde a "la dimensión del problema de la cerámica" y ha advertido a Maroto que “o actúan ya, o en 2024 no quedarán empresas en pie y eso supondrá miles y miles de personas sin trabajo”.

Medidas "muy importantes"

Aunque inicialmente la pregunta iba dirigida a la vicepresidente Calviño, la ministra de Industria, Reyes Maroto, ha sido la encargada de contestar y lo ha hecho sacando pecho de las acciones que ha tomado el Ejecutivo para socorrer a la industria azulejera. "El sector cerámico tiene a disposición un conjunto de medidas muy importantes como son los ERTE, la línea ICO, las ayudas directas, pero también un conjunto de medidas fiscales y regulatorias que están ayudando al sector a amortiguar el impacto de la subida de los precios energéticos", ha argumentado la titular de Industria.

Maroto ha asegurado que el Gobierno sí atiende las reclamaciones del sector y ha recordado que tanto la vicepresidenta Nadia Calviño, como la propia Maroto se han reunido con la industria azulejera de Castellón, "el sector se ha podido reunir también con el presidente del Gobierno", ha señalado.La ministra ha aprovechado también para llevar el debate al plano político y ha lanzado un dardo al Partido Popular. “Seguro que recuerda el impacto que tuvo la crisis financiera e inmobiliaria en el sector cerámico, cuando el sector vio reducida a la mitad la facturación, una pérdida de 10.000 puestos de trabajo. La recetas que el PP hizo para afrontar esta caída de empleo y producción fueron nulas, ni ERTE, ni ICO, ni ayudas”, ha interpelado Maroto al senador de Compromís.

Exigencia de cumplir Ley de Subvenciones

Respecto a la exigencia de cumplir con un periodo medio de pago a proveedores inferior a 60 días para acceder a las ayudas, Mulet también ha reprochado al Gobierno que este requisito "excluiría a la mayoría de empresas" y ha añadido que, "de no modificarse, se trata de unas ayudas ineficaces". Cabe recordar que este es uno de los aspectos del borrador que más preocupan al sector. La semana pasada tanto la patronal azulejera Ascer, como la mesa Salvem la Ceràmica de la Diputación de Castellón y hasta el propio presidente de la Generalitat, Ximo Puig, advirtieron al Gobierno de la necesidad de eliminar este requisito.

Respecto a este punto, la ministra se ha limitado a contestar que se trata de una condición que se incorporó a la ley de crecimiento y creación empresarial, "una ley que usted y su grupo parlamentario votaron", ha reprochado a Mulet. Aunque modificar la exigencia de este requisito sería competencia del Minsiterio de Economía, la ministra de Industria no ha clarificado si el Gobierno estaría dispuesto a rebajar esta exigencia para que las empresas cerámicas pudiesen acceder a las ayudas.

Maroto elude contestar sobre los plazos

No obstante, la ministra ha eludido contestar a otras de las demandas que más preocupan al sector y que el senador Mulet le ha trasladado, "es un fracaso que abril de 2024 sea la fecha aceptable para cobrar unas ayudas que son urgentes, es una barbaridad", ha considerado el senador de Compromís. En su respuesta, Maroto no ha abordado ni los plazos de cobro de las ayudas ni tampoco las consecuencias de la crisis con Argelia para la cerámica. "Argelia nos cierra el gas y lo abre para nuestro principal competidor que es Italia, donde además su Gobierno sí está dando ayudas directas a su industria", ha afeado Mulet.

Por el momento, el Gobierno sigue sin aclarar las principales incógnitas que han surgido tras la publicación del borrador que articula las ayudas a sectores gasintensivos. Aunque proceso de alegaciones sigue abierto hasta el próximo 3 de marzo, tanto patronal, sindicatos como las instituciones locales y autonómicas de Castellón ya han mostrado su descontento con este documento por no responder a las necesidades del sector cerámico.