VALÈNCIA. El Circuit Cultural Valencià va parcheando poco a poco las deficiencias que en 2020 encendió al sector. Ayer se presentó el informe de actividades de 2022 y se señala una tendencia a concentrar en menos compañías más representaciones, de manera que se intenta evitar los contrastes exagerados entre las propuestas ‘top’ y el resto, que hace tan solo dos años dejaba una estampa complicada de gestionar: la tercera representación más programada se llevaban un 50% menos que la primera; algunas compañías conseguían más de una treintena de peticiones mientras que cerca del 70% solo habían recibido una.
Ahora, dos años después, según los datos a los que ha tenido acceso este diario a través del resumen ejecutivo, las representaciones han subido desde las 1261 de 2021 a 2132 el pasado año (un incremento del 69,07%, teniendo en cuenta el contexto de restricciones pandémicas, si bien la comparativa de 2021 también refleja el aumento de cerca de un 30%). Por el contrario, el número de compañías contratadas baja de las 1047 de 2020 a 776 de 2022, un 25,88%.
También se reflejaba ya desde 2021 varios espectáculos que se habían podido ver más de una veintena de veces, mientras que en 2020 solo había uno, Horta, de L’Horta Teatre.
En todo caso, hay un dato relevante que ni el informe completo refleja: el número de compañías que registran sus espectáculos y que no son llamadas ni una sola vez. Es el caso de varias emergentes, que se quejaban a este diario de un sesgo conservador a la hora de programar, además de verse beneficiadas compañías que ya venían manteniendo una relación profesional fluida con los ayuntamientos anteriormente. Si bien el Institut Valencià de Cultura intenta hacer una muestra para los programadores de espectáculos más alternativos, el embudo de propuestas no es capaz de transformar esta iniciativa en algo relevante a nivel sectorial, sino casi en una lotería.
Por otra parte, cabe destacar la caída en picado de los espectáculos en valenciano, que bajan casi diez puntos (del 47% al 38%) en solo un año. No lo hace en favor del castellano, que también baja, del 40% al 30%. “Otros idiomas”, categoría que habitualmente engloba espectáculos escolares en inglés para los centros docentes de las poblaciones, recoge ese incremento y se más-que-dobla en solo un ejercicio, pasando del 13% al 30%.
También es interesante ver cómo se ajustan las distintas disciplinas. También en relación al año pasado, el teatro (55%) cede algo de espacio a la danza (9%), pero el circo sigue perdiendo año a año peso en la estadística: si en 2021 ya se tenía que conformar apenas con el 7,03%, este año la cifra se rebaja hasta el 5,68%. Por el contrario, la música sube casi dos puntos porcentuales, desde el 25% hasta el 27%. Las propuestas audiovisuales son las menos populares, con un 2,58%.
El Circuit Cultural Valencià llegó, en 2022, a un total de 508.497 espectadores: 333.296 en salas, 161.148 en espectáculos de calle y 14.053 en espacios no convencionales. La media de espectadores por función fue de 239, con una media de 19,79 euros de inversión por persona. La recaudación ascendió a un total de 1.690.634 euros.
El presupuesto total del Circuit Cultural Valencià para 2022 llegó a 10.061.762 euros. Las aportaciones se repartieron entre un 66% los ayuntamientos, un 24% el IVC, un 2% la Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL) y un 8% otros ingresos.