VALÈNCIA. Maxam ha reiterado su voluntad de "reubicar al mayor número posible" de trabajadores afectados por el cierre de Outdoors en la localidad vizcaína de Galdakao y ha abogado por "la negociación y el diálogo como vía para alcanzar las mejores condiciones de salida posibles" para los que no puedan serlo. Asimismo, ha advertido de que la convocatoria de huelga "impactará negativamente en la cadena de suministro a los clientes y generará perjuicios económicos y reputacionales a la compañía
Los comités de empresa, formados por UGT, CCOO, SIX y ELA, han convocado una huelga indefinida a partir de este miércoles, 16 de febrero, tras la decisión del cierre de la línea de fabricación de pólvora del negocio de Outdoors.
En un comunicado, la compañía ha reafirmado su voluntad de "reubicar al mayor número posible de trabajadores afectados" por el cierre de esta línea que, según ha precisado, "afecta exclusivamente al 5% del volumen de la producción total" en Galdakao.
Maxam ha subrayado que la venta del negocio de Outdoors es una operación que "se ajusta a la legalidad vigente" y que constituye "la mejor opción" para el futuro de la empresa y sus empleados. De esta forma, ha explicado, la compañía "actúa consecuentemente con la dinámica de concentración global del sector de la cartuchería de caza con su estrategia de focalizarse en los negocios principales de la compañía, las tecnologías energéticas".
La empresa ha asegurado que respeta las decisiones de los comités de empresa, así como el derecho a la huelga, si bien aboga por "la negociación y el diálogo con los representantes de los trabajadores como vía para alcanzar las mejores condiciones de salida posibles para la parte de la plantilla que no pueda ser reubicada".
Desde Maxam han advertido de que la convocatoria de huelga "impactará negativamente en la cadena de suministro a los clientes y generará perjuicios económicos y reputacionales a la compañía que irán en detrimento del clima y los objetivos de la negociación".
Finalmente, la dirección de la compañía ha solicitado a los comités de empresa que "respeten al máximo cualquier posición de los trabajadores" de Galdakao y "defendiendo no solo a aquellos que quieran ejercer libremente su derecho de huelga, sino también protegiendo a aquellos trabajadores que no quieran secundarla".