VILA-REAL. (EFE).- El entrenador del Villarreal B, Miguel Álvarez, considera que una de las claves para tratar de sumar a domicilio ante un rival de la entidad del Levante pasa por no permitir que el equipo valenciano se acerque al área, ya que si se dejan dominar en una presión baja van a sufrir mucho.
"Se trata de un nuevo rival que aspira al ascenso como muchos de los que nos vamos a encontrar, lo que supone una prueba de peso porque el equipo está hecho para regresar a Primera División", agregó el técnico del filial del Villarreal.
"Cada partido es una enseñanza y un aprendizaje. Esta vez vamos a jugar ante un rival muy competitivo, sabemos lo que nos espera y vamos a ver si somos capaces de poder hacer un buen partido y poder competir al máximo nivel. Aunque estamos en la quinta jornada, cada partido es importante", indicó.
Considera que deben anular las fortalezas del Levante y tener personalidad porque el rival querrá meterlo atrás. "Tenemos que ser protagonistas y buscar nuestras opciones en el juego de ataque porque también son muy peligrosos en el balón parado", puntualizó.
Destacó la importancia de las bajas de Pablo Íñiguez y Carlos Adriano. "Estamos justos en el puesto de central y eso nos limita", indicó Álvarez, quien destacó la importancia de haber sumado siete puntos en cuatro jornadas al tratarse de un Villarreal B joven y recién ascendido. "La situación nos da tranquilidad y nos quita prisas, aunque debemos seguir trabajando duro ya que queda mucho camino por recorrer", finalizó.