VALÈNCIA (EP). El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha salido este jueves al paso de las informaciones sobre la posibilidad de una tregua con el partido-milicia chií Hezbolá en la frontera con Líbano y ha recalcado que ha dado orden al Ejército para que continúe "con todas sus fuerzas" las operaciones contra el país vecino.
"Las noticias sobre un alto el fuego no son ciertas. Se trata de una propuesta franco-estadounidense a la que el primer ministro ni siquiera respondió", ha dicho la oficina de Netanyahu a través de su cuenta en la red social X, después de que Washington y París plantearan la posibilidad de una tregua de 21 días como paso previo a un alto el fuego.
Así, la oficina del primer ministro ha recalcado que las informaciones en prensa israelí sobre una orden al Ejército para rebajar la intensidad de los bombardeos mientras se sopesaba la propuesta "son contrarias a la verdad".
"El primer ministro ha dado instrucciones a las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) para que continuaran los combates con todas sus fuerzas y de acuerdo con los planes que le habían presentado", ha recalcado, antes de insistir en que la ofensiva contra la Franja de Gaza continuará también "hasta que se logren todos los objetivos de la guerra".
Minutos después, el ministro de Exteriores israelí, Israel Katz, ha dicho claramente que "no habrá un alto el fuego en el norte". "Seguiremos luchando con todas nuestras fuerzas contra la organización terrorista Hezbolá hasta la victoria y el regreso seguro de los habitantes del norte a sus hogares", ha zanjado.
La reacción llega después de que Washington y París reclamaran el miércoles una tregua "temporal" de 21 días entre Israel y Hezbolá de cara a "un acuerdo diplomático" para "evitar una mayor escalada en ambos lados de la frontera, propuesta que ha recibido el apoyo de la Unión Europea y varios países, incluidos varios estados árabes.
Asimismo, la coordinadora especial de Naciones Unidas para Líbano, Jeanine Hennis-Plasschaert, ha aplaudido la petición y ha expresado su deseo de que recabe un "apoyo inequívoco". Sin embargo, varios ministros israelíes han reclamado ya a Netanyahu que no acepte la propuesta y que apueste por la vía militar.
Durante las últimas horas han muerto al menos trece personas en Líbano a causa de nuevos bombardeos ejecutados por Israel, que ha asegurado que ha bombardeado "aproximadamente 75 objetivos terroristas de Hezbolá en el valle de la Becá y el sur de Líbano, incluidos depósitos de municiones, lanzaderas preparadas para disparar, edificios militares, terroristas e infraestructura militar de la organización".
Además, varios ministros israelíes también han reclamado este jueves al primer ministro, Benjamin Netanyahu, que no acepte la petición de una tregua de 21 días con Líbano. El ministro de Finanzas israelí, el ultranacionalista Bezalel Smotrich, ha indicado en su cuenta en la red social X que "la campaña (militar) en el norte debe terminar en un escenario: aplastando a Hezbolá y negando su capacidad de causar daño a los residentes en el norte".
"No se debe dar tiempo al enemigo para que se recupere de los fuertes golpes recibidos y se reorganice para continuar la guerra después de 21 días", ha sostenido, antes de añadir que "la rendición de Hezbolá o la guerra son la única manera de devolver a los residentes y la seguridad al norte y al país".
En esta línea, la ministra de Asentamientos y Proyectos Nacionales, Orit Strock -del partido de Smotrich-, ha recalcado que "no hay mandato moral para un alto el fuego, ni durante 21 días ni durante 21 horas". "Hezbolá ha convertido Líbano en un barril con explosivos", ha argumentado en su cuenta en X.
Strock ha solicitado a Netanyahu "no repetir los errores del pasado" y "no parar hasta solucionar (la situación por la vía militar)", una línea en la que se ha expresado también el ministro de Patrimonio, Amichai Eliyahu, quien ha dicho que los esfuerzos para lograr un alto el fuego suponen "una peligrosa hipocresía".
"No entregaremos nuestra seguridad a cambio de una paz falsa", ha dicho el ministro, miembro del ultraderechista Otzma Yehudit, que durante las últimas horas ha convocado una "reunión urgente" para debatir próximamente la propuesta, según ha recogido el diario israelí The Times of Israel.
Mientras tanto, el polémico ministro de Seguridad Nacional, el ultranacionalista Itamar Ben Gvir, ha ido un paso más allá y ha asegurado que si Netanyahu pacta un alto el fuego en Líbano, él y los miembros de su partido, Otzma Yehudit, abandonarán la coalición y retirarán su apoyo al Ejecutivo.
"Lo más básico y comprensible es que cuando tu enemigo está de rodillas, no le dejas recuperarse, sino que trabajas para derrotarlo", ha manifestado Ben Gvir al término de una reunión de su partido, donde ha manifestado que cesar los ataques "transmite debilidad y pone en peligor la seguridad de tus ciudadanos".
Por su parte, el líder opositor Yair Lapid ha argumentado que el Gobierno debería aceptar la propuesta, pero "sólo durante siete días", con el objetivo de "no permitir que Hezbolá restablezca sus sistemas de mando y control".
"No aceptaremos ninguna propuesta que no incluya la eliminación de Hezbolá de nuestra frontera norte", ha dicho en su cuenta en X, donde ha incidido en que "cualquier propuesta que se presente debe permitir a los residentes del norte regresar inmediatamente y sanos y salvos a sus hogares".
Además, ha sostenido que cualquier violación del alto el fuego, aunque sea la más mínima, conducirá a que Israel ataque de nuevo con toda su fuerza y "en todas las zonas del Líbano", sin que Netanyahu se haya pronunciado oficialmente por ahora sobre la propuesta desvelada por Estados Unidos y Francia.