CASTELLÓ. Finalmente no habrá nueva línea de alta tensión que atraviese la zona quemada en el fatídico incendio de Bejís que en el verano de 2022 arrasó alrededor de 20.000 hectáreas. De hecho, no se materializará ninguna de las dos que se estaban tramitando. El Boletín Oficial del Estado ha publicado recientemente dos negativas, prácticamente consecutivas, de la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental a dos proyectos de Forestalia, que comprendían ocho parques fotovoltaicos (Tania, Ursa, Tarpeya, Tarquecio y Yuriko, por un lado, y Larentina, Inus y Ladon, por otro) en Aragón "y sus infraestructuras de evacuación".
Esta, precisamente, era la actividad que afectaba a las provincias de Castellón y Valencia y, en lo que se refiere a la zona afectada por el fuego hace dos años y medio, a diferentes términos municipales de la Comunitat. En Castellón se veían afectados seis pueblos (El Toro, Torás, Teresa y Jérica por un lado; y Teresa, Jérica, Altura y Segorbe en virtud del otro proyecto) y en Valencia uno afectado por el fuego: Alcublas. Además, había una gran cantidad de localidades a las que no llegó el fuego que también debía atravesar la línea eléctrica: Pina de Montalgrao y Barracas en Castellón y Algar de Palancia, Alfara de la Baronia, Algímia de Alfara, Torres Torres, Estivella, Albalat dels Tarongers, Sagunto, Petrés, Gilet (por uno de los proyectos) y Llíria, Olocau, la Pobla de Vallbona, Bétera, San Antonio de Benagéber, Paterna y l'Eliana por el otro.
Se trataba de infraestructuras de evacuación de prácticamente 190 kilómetros de longitud total (la mayor parte en Teruel) y que discurrían en paralelo en algunos puntos. Pero finalmente no se materializarán debido a la negativa del Ministerio de Transición Ecológica.
De hecho, han sido precisamente las líneas de alta tensión las que han motivado las negativas. Así, en un caso la Dirección General concluye que el proyecto para las cinco plantas solares de Zaragoza "no resulta ambientalmente viable, debido a que los impactos ambientales severos que provocarían las infraestructuras de evacuación en el trazado propuesto, así como las plantas solares Tania y Yukiko, que no quedarían suficientemente mitigados con las medidas y modificaciones planteadas por el promotor". La redacción es prácticamente idéntica para los tres parques fotovoltaicos previstos en Teruel, que destaca la afección de la infraestructura de evacuación.
De hecho, el Ministerio de Transición Ecológica deja abierta la posibilidad de que Forestalia pudiera materializar en un futuro las tres plantas de Teruel (Larentina, Inus y Ladon) y otras tres de Zaragoza (Ursa, Tarquecio y Tarpeya), que, "con modificaciones, podrían resultar ambientalmente viables si en un futuro se encuentra una solución adecuada a la evacuación de su energía". De todas formas, esto parece altamente improbable, toda vez que se debería solicitar una nueva conexión a la red, que en el caso del proyecto de Teruel la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia ya declaró caducada; e iniciar el proyecto y su tramitación de nuevo.
Asimismo, la imposibilidad de ejecutar estas líneas eléctricas hace materialmente imposible materializar otros proyectos fotovoltaicos previstos en la zona y que tramitaban diferentes empresas.